El ícono sexual de los años cincuenta, Brigitte Bardot, se mostró en desacuerdo con las denuncias de acoso y abuso que distintas mujeres de Hollywood han realizado en contra de personalidades, como por ejemplo Harvey Weinstein, que motivó a las víctimas a crear el movimiento #MeToo para luchar contra este tipo de conductas inapropiadas.
En una reciente entrevista para la revista francesa Paris Match, Bardot calificó de «hipócritas y ridículas» lo expuesto por sus colegas, asegurando que nunca fue víctima de algo parecido a lo largo de su carrera cinematográfica y musical.
«Nunca he sido víctima de acoso sexual, y para mí era agradable que me dijeran que era muy guapa o que tenía un buen culo. Este tipo de cumplidos son agradables», manifestó la veterana actriz.
Y sin medir consecuencias, continuó: «Hay muchas actrices que van provocando a los productores para conseguir un papel. Después, para que se hable de ellas, dicen que sufrieron acoso… En realidad, más que beneficiarlas, esto les perjudica».
Con 83 años, la musa de Francia se encuentra completamente dedicada a luchar por los derechos de los animales. No obstante, en otras instancias ha sido protagonista de escándalos políticos y raciales: apoyó a la candidata francesa de ultraderecha Marine Le Pen, de quien dijo ser «la única que tiene un par de cojones», y en 2014 tuvo que pagar una multa de 15.000 euros por realizar comentarios xenófobos contra la comunidad musulmana.