El tricolor ondea en el lujoso escenario del Planet Hollywood, en Las Vegas, durante la reciente edición del Miss Universo. Como ya es costumbre, la candidata venezolana destaca en el cuadro de favoritas, aunque este año la atención también está puesta en la joven influencer que forma parte del jurado, un contundente mensaje para quienes aún se muestran incrédulos de la importancia que han cobrado las redes sociales.
Lele Pons saluda al público, sonríe, se mantiene ecuánime, aunque debe esperar el final del certamen para poder abrazar y felicitar a su compatriota. “¡Quería que ganara, se lo merecía!”, exclama con espontaneidad la rubia, como quien libera un secreto guardado por años, mientras ambas se fotografían con la bandera del país natal.
Su vínculo con Venezuela no desaparece, por el contrario, no hay escenario donde no lo tenga presente. “Venezuela está en cada pequeña cosa que hago. Ser latina significa muchísimo para mí y siempre me ha caracterizado en mis plataformas. Aunque no viva en mi país natal, esa cultura permanece en mí a través de las comidas, expresiones, música y bailes. Salí a muy temprana edad de Venezuela, pero puedo recordar perfectamente cómo me sentía en mi país en comparación con Estados Unidos. La energía es muy diferente”, asevera la extrovertida joven, que en sus primeros años acostumbraba jugar entre los tractores de la finca de su abuelo en Turén, estado Portuguesa.
Los días de anonimato quedaron atrás cuando, por sugerencia de una de sus pocas amistades de la secundaria, incursionara en Vine, la extinta red social de Twitter, donde con videos de apenas seis segundos de duración demostró talento para la actuación y el humor, y atrajo en poco tiempo a miles de seguidores hasta convertirse en una de las diez personas más seguidas en Internet y primera en lograr el millardo de reproducciones o los llamados loops. Aquel “patito feo”, víctima del acoso escolar -episodio que, asegura, la hizo una persona más fuerte-, pasó a convertirse en la más popular con invitaciones a fiestas, actividades y hasta a la Casa Blanca, donde fue recibida por la primera dama del momento, Michelle Obama, con quien se hizo una selfie.
“Sigo sufriendo bullying todos los días, hay gente que me odia, otros que me aman, pero la experiencia vivida en la secundaria me enseñó a que estas cosas no me afecten. Ahora soy una persona más fuerte y entiendo que tienes que pasar por eso para aprenderlo, es como las vacunas, que son necesarias para tener una vida buena y saludable”, afirma la joven, que destaca la ayuda de la familia y amigos para superar ese episodio que inspiró su primer libro promocionado en Amazon, Sobreviviendo a la adolescencia.
Vida viral
La coqueta Daphne de Scooby Doo nunca será recordada de la misma manera luego de que Lele la interpretara en un divertido video compartido en su canal de Youtube, que rápidamente comenzó a ser replicado por seguidores hasta sumar más de 21 millones de reproducciones.
“Cuando escuché la canción (“Scooby Doo Pa Pa”) me encantó e inventé hacer un video casero con Innana (Sarkis), utilizando los trajes de Wilma y Daphne. Sólo lo hice para bailar, reír y divertirnos un rato, nunca me imaginé que la gente enloqueciera con el video y se convirtiera en viral”, relata al recordar el entretenido baile junto a la joven actriz canadiense.
Sus dotes para el baile y la actuación también son evidentes en el reciente video Havana, en el que acompaña a la cantante cubana Camila Cabello, quien le propusiera participar en la filmación debido a la amistad que mantienen desde años. “Estuve tan feliz y agradecida porque estimo y admiro mucho a Camila, ella es impresionantemente talentosa. Para mí fue una inolvidable experiencia”.
La música parece llamar a Pons, quien desde hace años se prepara para mostrar otra faceta fuera de las redes sociales. “Estoy trabajando en varios proyectos musicales. Recientemente participé en los Grammy, bailando la canción “The Middle” de Zedd Maren Morris. Aunque, por supuesto, seguiré creando comedia y actuación. Este año mi objetivo principal está dirigido a cantar y bailar”, asevera la joven, que se guarda los detalles de sus próximos pasos en las artes.
Sin embargo, no deja de ser muy consciente del papel de los influencers ante los millones de seguidores que suman en las diversas plataformas, en especial entre los más jóvenes. “Creo que tenemos la enorme responsabilidad de dar mensajes positivos a la sociedad, nuestro objetivo es crecer rápidamente y ahora convertirnos en líderes. Personalmente quiero ser un modelo que sigan las niñas y jóvenes para que tengan más confianza en sí mismas, porque toda mujer con una alta y sana autoestima puede alcanzar lo que se proponga en la vida. El bullying es un asunto al que siempre le he dado mucha importancia porque fui víctima, y como problema cada vez más frecuente debe ser considerado por la sociedad con mucha seriedad, por eso hay muchos mensajes que trato de expresar a través de mis plataformas, valores familiares, lealtad, la pasión al hacer algo, la perseverancia, la importancia de estar orgullosa de tu país, tus orígenes, de quién eres”.
“Quiero ser capaz de crear cambios a través de mensajes y ejemplos positivos, inspirar a las mujeres jóvenes a que sean fuertes, seguras de sí mismas y capaces de realizar sus sueños. También quiero contribuir a crear un puente entre los medios digitales y los tradicionales”
Las claves de Lele Pons
. Crear buen contenido: “Tienes que producir algo que a la gente le guste mirar una y otra vez”.
. Ser constante: “Cada una de mis plataformas tiene un plan y horario bien específico. Igualmente lo tiene el escribir, filmar, editar y compartir mis videos”.
. Disfrutar lo que haces: “Crear contenido es un trabajo muy difícil, pero si lo haces con pasión puede ser muy divertido al final y lo disfrutas a plenitud. Todo esto hace que sea mejor y que la conexión sea mayor con la gente”.
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