Dolly Parton lideró un supergrupo en una conmovedora interpretación de «Jolene» y Eminem puso de pie a todo el público en la gala del Salón de la Fama del Rock and Roll el sábado en Los Ángeles, que incorporó su conjunto de leyendas más ecléctico en años.
A la reina del country y el rapero se unieron el dúo de pop futurista Eurythmics, el baladista Lionel Richie, los británicos Duran Duran, la compositora Carly Simon y el dúo de Pat Benatar y Neil Giraldo para ingresar al panteón de la música.
«¡Ahora soy una estrella de rock!», gritó Parton al subir al escenario con los puños en el aire.
La mujer de 76 años de edad había intentado declinar su candidatura al prestigioso honor porque no se sentía lo suficientemente rockera: «No entendí en ese momento que se trata de un poco más que eso», dijo con su enorme sonrisa.
P!nk y Brandi Carlile interpretaron juntas clásicos de Parton como «9 to 5», antes de que la cantante country regresara al escenario con un atuendo increíblemente ceñido y una guitarra eléctrica con incrustaciones de cristal para estrenar su nueva canción de rock.
Un pueblo de rap
Eminem entregó una mezcla de viejos y nuevos éxitos, tras irrumpir en el escenario al ritmo de «My Name Is».
Su leal mentor, el Dr. Dre, fue el encargado de incluir en el Salón de la Fama al autor de The Marshall Mathers LP, uno de los álbumes más vendidos de todos los tiempos, quien ganó el codiciado reconocimiento al templo del rock en su primer año como elegible.
Dre dijo que le había preguntado a Eminem si había algo específico que quisiera decir en la ceremonia: «Quiero que les digas a todos que tengo un pene enorme», bromeó.
Fue un guiño al gusto por la provocación de Eminem, que construyó una carrera fulgurante gracias a un indiscutible talento lírico condimentado a veces con una buena dosis de polémica.
Eminem invitó a Steven Tyler a interpretar «Sing For The Moment», y Ed Sheeran hizo una aparición sorpresa para cantar el sample de «Thank You» de Dido en «Stan».
El rapero, de 50 años de edad, se puso gafas para leer sus palabras de aceptación, en las que mencionó los obstáculos que superó, incluida una infancia problemática y su lucha contra las adicciones.
Pero dedicó la mayor parte de su discurso a agradecer a decenas de compañeros raperos.
«Dicen que se necesita un pueblo para criar a un niño. Bueno, se necesitó todo un género y una cultura para criarme a mí», dijo. «Soy un desertor de la escuela secundaria, con una educación de hip hop, y estos son mis maestros».
«Y es su noche tanto como la mía».
Vibras rockeras
La promoción de 2022 trajo al legendario Salón de la Fama más raperos, estrellas del pop, R&B y country.
«El rock and roll no es un color, es un sentimiento, es una vibra», dijo Lionel Richie, cuya actuación incluyó «Easy (Like Sunday Morning)» con Dave Grohl como invitado.
Los pioneros del synth pop Eurythmics, el dúo compuesto por Annie Lennox y Dave Stewart, también ocupó su lugar entre los más grandes del rock, pero antes interpretaron, entre otros temas, su clásico «Sweet Dreams (Are Made Of This)».
Duran Duran optó por ofrecer un popurrí con lo mejor de su repertorio, que incluyó «Girls On Film» y «Hungry Like The Wolf».
El líder, Simon Le Bon, leyó una carta del exguitarrista de la banda Andy Taylor, en la que contó que llevaba años sufriendo un cáncer de próstata metastásico.
Pero Taylor dijo que estaba «muy contento de estar aquí para ver el día» en que llegaron al salón del rock.
Carly Simon fue introducida por Sara Bareilles, pero tampoco asistió pues dos de sus hermanas murieron recientemente de cáncer.
«Una de las mejores cosas de la música», dijo Simon en un mensaje que leyó Bareilles, «es su extraña habilidad para hacer arte físico a partir de emociones sin forma como la alegría y el dolor».
La sensación del pop Olivia Rodrigo subió a continuación al escenario para interpretar el éxito que catapultó en la década de 1970 a Simon, «You’re So Vain», mientras los espectadores en la gala, incluidos Carlile y LL Cool J, cantaban.
Presentados por Sheryl Crow, Benatar y Giraldo ofrecieron una interpretación conmovedora de sus mejores canciones, incluidas «Love is a Battlefield» y «Heartbreaker».
El broche de oro de la noche lo puso Bruce Springsteen, quien fue el encargado de presentar el ingreso especial del legendario productor Jimmy Iovine.
El Jefe actuó junto a John Mellencamp en honor al recientemente fallecido Jerry Lee Lewis, y brilló con un solo de guitarra en una versión de «Great Balls of Fire».