La actriz y presentadora puertorriqueña Adamari López está de regreso en su casa luego haber sido dada de alta del hospital, en el que estuvo recluida desde hace más de un mes por complicaciones relacionadas con una influenza.
Con voz débil, la actriz indicó que le tomará tiempo recuperarse del todo de la afección. “Un catarro una influenza me llevo a esto. Ahora voy a estar recuperándome y tengo que tomar terapia para fortalecer el cuerpo y la voz. Mi cuerpo sufrió muchos cambios”, dijo en entrevista telefónica con el programa Un nuevo día.
López indicó que podrían faltar varias semanas antes de que pueda estar de regreso a las cámaras de Telemundo, cadena que emite el programa desde Miami.
“Mi sistema inmunológico está débil no puedo estar donde hay mucha gente”, compartió la querendona boricua. López explicó que toma terapias todos los días, pero aseguró que se encuentra en camino hacia la recuperación.
«En el proceso hubo muchos cambios para los que tengo que irme recuperando y lleva su tiempo. Es un proceso lento», dijo.
La salud de López y su ausencia de las cámaras y de sus redes sociales, en las que siempre ha estado muy activa, preocuparon a sus seguidores, quienes se mantuvieron preguntando constantemente sobre la situación de la querendona puertorriqueña.
López fue ingresada a principios de octubre por una fuerte gripe. Luego de semanas de ausencia, su esposo, el bailarín español Toni Costa, reveló que la actriz –quien es sobreviviente de cáncer de seno- había sufrido una influenza que le comprometió los pulmones.
“Mi mamá está cuidando de ella. Tiene que cuidarse con los tratamientos adecuados que le están dando. No le queda de otra más que quedarse tranquila para que el pulmón se recupere con el apoyo de la familia y poner de su parte», dijo Costa, quien se ha mantenido activo en sus redes sociales publicando vídeos de las ocurrencias de Alaïa, de 3 años, y de los mensajes que le envía deseando su pronta recuperación.
La semana pasada, mientras artistas puertorriqueños -algunos de los cuales trabajaron con López desde que era una niña de cinco años- enviaron por medio de El Nuevo Día deseos para su pronta recuperación, su hija Alaïa se vestía de doctora para visitar por primera vez en semanas a sumamá en el hospital.