El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, prometió este jueves una nueva ronda de recortes de impuestos que, adelantó, beneficiarían a la clase media.
«El presidente nos ha pedido que comencemos a trabajar en lo que llamamos un impuesto 2,0», dijo Mnuchin desde el Foro Económico Mundial de Davos en Suiza.
«Serán recortes de impuestos para la clase media y también se buscarán otros incentivos para estimular el crecimiento económico», agregó.
El presidente Donald Trump, quien enfrenta una dura candidatura de reelección en noviembre, planteó la posibilidad de recortes de impuestos a principios de esta semana.
Cualquier nuevo estímulo se sumaría a la ronda de recortes de impuestos de 1,5 billones de 2017, principalmente dirigida a las corporaciones y a los contribuyentes más ricos.
Trump necesita una economía fuerte para aumentar sus posibilidades de un segundo mandato en la Casa Blanca.
Mnuchin dijo que los recortes de impuestos de 2017 no habían causado déficits presupuestarios. Reiteró que esas reducciones fiscales se compensarán con una subida del crecimiento.
Pero para llegar allí, el gasto tendrá que ser controlado, dijo. «No hay duda de que necesitamos reducir la tasa de crecimiento del gasto público porque no podemos mantener estos déficit creciendo a estos niveles», señaló.
El déficit federal el año pasado aumentó 26%, 205.000 millones, su nivel más alto en 7 años.
La Oficina de Presupuesto del Congreso proyecta que superará un billón de dólares este año.
Trump dijo esta semana que estaba abierto a la idea de bajar el gasto en temas como atención médica y jubilación. Esto provocaría indignación entre los demócratas y marcaría una ruptura brusca con su posición anterior.
Antes de las elecciones de mitad de término de 2018, Trump también planteó la idea de una ronda de recortes de impuestos, que nunca se materializó.