Las remesas en Venezuela siguen bajando pero se estima que lleguen a representar el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) de la nación.
Así lo declaró el economista Asdrúbal Oliveros para el portal Banca y Negocios. Oliveros apuntó a que el crecimiento de las remesas puede ser mayor durante los próximos años. .
Afirma que el ingreso estimado de remesas en el país se ubica actualmente en 3.000 millones de dólares. Esto representa una leve reducción respecto al año pasado.
Este monto, señala Oliveros, representa solo el 5% del PIB y que todavía es muy bajo en comparación con el 10% promedio de Latinoamérica.
Este índice representa el ingreso de remesas en los diferentes países de la región por el movimiento migratorio de los últimos años.
Latinoamérica y las remesas rentables
Las remesas recibidas en los países Latinoamérica durante el 2022 mostraron un crecimiento de 11.6%. Así lo refleja un reporte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
«Este incremento es menos de la mitad de lo registrado en 2021 (25,9%). El crecimiento de las remesas en 2022 significó un influjo adicional de recursos de 15.072 millones de dólares».
Esto, respecto al año anterior para las familias de la región, dice el reporte.
Oliveros estima que las remesas podrían registrar un crecimiento más agresivo en los próximos años. Esto, hasta representar un 10% del PIB venezolano. Así se igualaría el peso en valor económico que estos ingresos tienen en el resto de los países de la región.
«Hace cuatro años, las remesas no representaban nada en Venezuela. Pero serán cada vez más relevantes», agregó el economista.
Índice regional
«Aún cuando Venezuela sumaba más de 7 millones de migrantes al cierre de 2022, los datos del BID no colocan al país como destino relevante para estos flujos», agregó.
En Sudamérica lidera Colombia con 9.429 millones de dólares de ingresos en remesas. Esto es el equivalente a 2,8% del PIB.
Le sigue Ecuador con 4.961 millones de dólares (4,3% del PIB). Luego Brasil, con 4.711 millones de dólares (0,3% del PIB).
Luego viene Perú, con 3.866 millones de dólares (1,6% del PIB) y Bolivia con 1.436 millones de dólares (3,3% del PIB).
Las condiciones socioeconómicas de más de 60% de los migrantes venezolanos son precarias. El envío de remesas suele ser escaso y espasmódico.