El mercado del oro tras un análisis más detallado de los datos de inflación de agosto en EE UU, perdió el optimismo. Las cotizaciones del oro, después de haber perdido su crecimiento, cayeron por debajo de los 1700 dólares. Llegaron a un punto de ruptura de la zona de soporte muy importante de 1680-1700 dólares; que retiene el oro de un colapso a 1400 dólares.
La razón principal del cambio drástico en los humores fueron los datos de inflación estadounidense. El mercado estaba esperando que la «hidra inflacionaria» quedará encerrada, gracias a la caída de los precios de los componentes energéticos de la inflación. Sin embargo, después de cortar una cabeza de la hidra inflacionaria al bajar los precios del petróleo, a la hidra le crecieron dos más, que aceleraron la inflación subyacente.
Como resultado, con una caída ligeramente más débil de lo esperado del índice de precios al consumidor en los Estados Unidos en agosto del 8.5% al 8.3% (esperado 8.1%), el IPC subyacente aumentó en términos anuales del 5.9% al 6.3%, y mensual del 0.3% al 0.6%. Es decir, todas las esperanzas de los inversores de una trayectoria más suave para aumentar la tasa de la FED en 50 puntos porcentuales se derrumbaron de la noche a la mañana.
Oro sin crecimiento
Ahora los inversores están convencidos de que el regulador financiero estadounidense -en la reunión de septiembre del próximo martes y miércoles el 20 y 21- aumentará la tasa en 75 puntos porcentuales, o inmediatamente en 100 p.p. Esto no encaja de ninguna manera con el crecimiento de los activos de riesgo. Tampoco con el crecimiento del oro, que depende en gran medida del nivel de las tasas de interés en la economía estadounidense.
Los grandes participantes, como el banco Societe Generale, han duplicado sus posiciones contra el oro. Un impulso negativo adicional a las cotizaciones fue dado por las preocupaciones sobre una posible reducción en la demanda de artículos de oro en China, uno de los mayores consumidores de joyería.
Como resultado, las cotizaciones llegaron a una posición extremadamente peligrosa. Al fijarse por debajo de los $1680 por onza troy y hasta noviembre podemos ver la venta más fuerte del principal metal precioso.
Es poco probable que el mercado se atreva a tomar una decisión tan importante antes del anuncio de la decisión de la FED. Por lo tanto, los inversores que no estaban preparados para un probable colapso de los precios del oro en 16% o más, tienen tiempo hasta el 21 de septiembre, como mínimo, cubrir sus posiciones y, como máximo, prepararse para una oportunidad de ganar en una fuerte caída en las cotizaciones del oro tras la reunión de la FED.
Información suministrada por Iván Marchena, Jefe del Departamento de Análisis Metadoro.
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