La llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos ha incrementado la incertidumbre en el mercado petrolero venezolano, especialmente porque la producción de Chevron en el país representa escasamente 1% del consumo de Estados Unidos, algo que la nueva Administración del republicano podría sustituir fácilmente.
El economista y especialista en temas petroleros, Rafael Quiroz, señaló que Venezuela puede hacer muy poco, pues los «200.000 barriles de petróleo diarios (bpd), que es lo que produce Chevron y lo único que exportamos hacia los Estados Unidos, es escasamente 1% del consumo petrolero norteamericano, lo cual puede sustituirlo Canadá, el mejor vecino y aliado energético que tienen Washington».
Producción petrolera de Chevron no representa un consumo importante para EE UU
«Seamos sinceros y veamos las cifras crudamente para así afirmar con propiedad si de verdad somos indispensables, en términos petroleros, para el ‘Imperio’ del Tío Sam», señaló en declaraciones publicadas en sus redes sociales.
El especialista añadió que «aún nos sobrevaloramos en materia petrolera y nos han hecho creer el mito que ‘somos la mayor reserva petrolera del planeta’. Nos gusta vivir de fábulas, mentiras y leyendas».
Señaló que un cambio significativo en la política energética de Estados Unidos significa otorgar concesiones a granel para perforaciones de crudo y gas en tierras y aguas federales, echar marcha atrás los beneficios a los vehículos eléctricos, y desregularizar el poder de la producción energética nacional liberando el ‘fracking’ sin restricción alguna.
Además de derogar ambiciones ambientales y eliminar créditos fiscales para energías limpias, además de prepararse para retirarse del Acuerdo Climático de París y fortalecer la infraestructura energética norteamericana.
«Todo esto siembra un mar de expectativas y tendencias que indican que se avecinan precios del petróleo con tendencia hacia la baja, los cuales podrían verse aún más afectados por la desaceleración de la demanda petrolera», añadió en sus redes sociales.
Quiroz precisó la era Trump llega en un momento precario de la transición energética de Estados Unidos y «llena de incertidumbre a todo el hemisferio occidental por la desaceleración de la demanda petrolera».