El diputado Tony Boza, elegido en las parlamentarias de diciembre del año pasado, presentó ante la Comisión de Finanzas de Desarrollo Económico una propuesta para indexar la economía al dólar, lo que supone una forma de dar un giro a la crisis que aqueja a los venezolanos desde hace años.
«Lo que estamos planteando es que sean los salarios de la administración pública y de los pensionados, más el cálculo del presupuesto público, los que estén bajo una fórmula indexatoria que se parezca a la que ha venido aplicando el Estado venezolano de distintas formas», señaló el parlamentario en entrevista concedida a Russia Today.
Boza expresó que ese proceso de indexación se daría como una adecuación al proceso hiperinflacionario; es decir, que todas las transacciones lleven el mismo ritmo de la inflación para que el poder adquisitivo no se pulverice.
Señaló que la indexación permitirá que cuando se formule el presupuesto de la nación los recursos previstos no pierdan su valor y sirvan para ejecutar proyectos, comprar, pagar nóminas, entre otros compromisos que permitirían motorizar la economía.
«En Venezuela el presupuesto se calcula en noviembre y se aprueba en diciembre. Cuando llega enero, febrero o marzo para su ejecución, ya ha perdido la mitad o una tercera parte de su valor debido a la inflación», indicó.
En Venezuela, el precio del dólar paralelo suele usarse como referencia para las transacciones particulares y de comercio privado. El medio señaló que la economía venezolana parece haber tomado un ligero respiro por la dolarización de facto que se registra en el país.
«La manipulación externa de la tasa de cambio no obedece a ningún criterio de oferta y demanda del juego económico formal. Lo han declarado actores de la administración estadounidense: la tasa de cambio ha sido utilizada como un mecanismo de perturbación contra la economía, que obedece a asuntos políticos y geopolíticos», aseguró.