Exxon Mobil, la mayor petrolera estadounidense, diseñó estrategias para disminuir las preocupaciones sobre el aumento de las temperaturas y tratar de contradecir los hallazgos científicos sobre la crisis climática que podrían dañar su negocio de petróleo y gas entre 2006 y 2016, según los documentos internos y entrevistas con exejecutivos que pudo hacer The Wall Street Journal (WSJ).
No obstante, de cara al público era otra la imagen que la empresa mostraba, pues en 2006 -y tras años de negarlo- la petrolera emitió su primera declaración pública de que la quema de combustibles fósiles contribuye a la crisis climática.
Los documentos revisados por el medio señalan que durante el mandato de una década de Rex Tillerson (quien fue director ejecutivo de 2006 a 2016) el equipo ejecutivo intentó sembrar dudas sobre la gravedad de los impactos del cambio climático.
Los científicos de Exxon apoyaron investigaciones que cuestionaron los hallazgos de la ciencia climática convencional.
En la actualidad, Exxon se enfrenta a decenas de demandas en todo Estados Unidos que acusan a las petroleras de engañar sobre la crisis climática y piden millones de dólares por daños y perjuicios.
Una de estas demandas es del condado de Maui en Hawái, donde los incendios forestales mataron a más de 100 personas el agosto pasado, que en 2020 alegó que la isla enfrentaba mayores riesgos relacionados con el clima -entre otros, la posibilidad de incendios forestales más peligrosos- debido a las empresas de combustibles fósiles.
El actual director ejecutivo de la empresa, Darren Woods, dijo al WSJ que «cuando se saca de contexto, (la información) parece mala».
«Pero al haber trabajado con algunos de estos colegas al principio de mi carrera, tengo la ventaja de saber que son personas con buenas intenciones. Sin embargo, ninguno de estos viejos correos electrónicos y notas importan. Estamos construyendo un negocio completo dedicado a reducir las emisiones (tanto las nuestras como las de otros) y gastando miles de millones de dólares en soluciones que tienen un impacto real y sostenible», anotó al tabloide.
Bajo la dirección de Woods, quien se convirtió en director ejecutivo en 2017, Exxon se ha comprometido a destinar 17.000 millones de dólares (unos 15.902 millones de euros) durante cinco años en tecnologías de reducción de emisiones.