El gobierno de Estados Unidos sorprendió a muchos este martes al anunciar la flexibilización de algunas sanciones que pesaban contra el régimen venezolano de Nicolás Maduro. La noticia se conoció 24 horas después de que el presidente Joe Biden también tuvo un gesto similar de levantar algunas de las restricciones contra Cuba, que se habían reimpuesto durante los cuatro años de Donald Trump en la Casa Blanca.
Sobre lo de Venezuela, Washington le otorgará una licencia limitada a la petrolera Chevron para que pueda negociar directamente con la venezolana Pdvsa. Esto, por un lado, buscaría presionar para que se restablezcan las negociaciones en México entre el oficialismo y la oposición, las cuales quedaron en un punto muerto luego de la extradición de Álex Saab de Cabo Verde a Estados Unidos.
- Estados Unidos levanta algunas de sus sanciones económicas contra Venezuela
- México está listo para recibir a representantes de Maduro y la Plataforma Unitaria
Petróleo venezolano para Estados Unidos
Si las negociaciones son exitosas, Estados Unidos permitirá a la empresa que extraiga y venda petróleo venezolano.
En ese sentido, un alto funcionario estadounidense aclaró que se trata de una “licencia limitada” que permite que Chevron negocie los términos de las posibles actividades futuras en Venezuela, pero “no permite cerrar ningún nuevo acuerdo con Pdvsa”.
Tras el anuncio de Washington, Caracas reclamó el “levantamiento absoluto” de las sanciones.
“Venezuela aspira a que estas decisiones de los Estados Unidos de América inicien el camino para el levantamiento absoluto de las sanciones ilícitas que afectan a todo nuestro pueblo”, escribió la vicepresidenta Delcy Rodríguez en Twitter.
Chevron había minimizado su presencia en Venezuela, delegando la mayoría de las decisiones a Pdvsa, luego de que Washington endureció las sanciones en 2020. Según el portal América Economía, como primer paso hacia la expansión, Chevron formaría un equipo para mercadear crudo venezolano.
La Cumbre de las Américas
Y aunque los funcionarios estadounidenses hablen de coincidencias, las razones de las decisiones de Biden saltan a la vista. Entre ellas la Cumbre de las Américas, que se realizará el mes entrante en Los Ángeles, y si bien la Casa Blanca no comunicó aún la lista de invitados –se espera que ocurra esta semana–, el jefe de la diplomacia para las Américas, Brian Nichols, afirmó a principios de mes que no espera que Cuba, Nicaragua y Venezuela estén presentes por considerar que no respetan los preceptos democráticos.
México, el primero de algunos países de la región en amenazar con boicotear la cita si hay países excluidos, podría ser entonces sensible a esta flexibilización de la posición estadounidense, en especial cuando el siempre polémico tema migratorio y un impulso de una agenda política interna en el país son claves para Biden.
Además, un eventual acuerdo con el petróleo venezolano permitiría la entrada de más crudo a suelo estadounidense, lo cual ayudaría a combatir la galopante inflación que aqueja la popularidad del demócrata.
Aun antes de ganar las elecciones, Biden había prometido que reversaría las medidas tomadas por Trump tanto en el caso de Cuba como en el de Venezuela.
Estados Unidos mira nuevas alternativas
En el caso de Caracas, la administración viene diciendo desde hace rato que los cuatro años de presión máxima que impuso Trump contra el régimen no dieron resultados y había que pensar en nuevas alternativas.
Sin embargo, sus planes quedaron en remojo el año pasado después de la brutal represión del régimen cubano contra manifestantes en la isla que salieron a protestar a las calles y que provocaron una airada reacción en Estados Unidos.
En cuanto a los planes con Maduro, estos se complicaron luego de que se filtró que su administración pretendía levantar las sanciones a la venta de petróleo para compensar la escasez de combustible que está generando la guerra de Rusia en Ucrania.
No obstante, ayer algunos aliados demócratas de Biden en el Congreso, como el senador Bob Menéndez, le advirtieron al presidente que cualquier signo de debilidad frente a estos regímenes sería duramente criticado, pues no se podía premiar a una dictadura responsable de amplias violaciones de derechos humanos.
Incluso el senador republicano cubano-estadounidense Marco Rubio denunció que la política exterior de Biden “se basa en apaciguar y dar concesiones a dictadores”.
- Más información en El Tiempo: Con menos sanciones, Estados Unidos le allana el camino al crudo de Venezuela
*SERGIO GÓMEZ MASERI y ANA RODRÍGUEZ BRAZÓN
Corresponsales de EL TIEMPO
Washington y Caracas