El suministro confiable y continuo de combustibles al mercado interno nacional es cada vez más precario, por lo que Petróleos de Venezuela profundiza el racionamiento de gasolina y diesel automotor incluso en la Gran Caracas, región considerada estratégica por el gobierno de Nicolás Maduro, afirmaron fuentes del sector.
Iván Freites, directivo de la Federación Única de Trabajadores Petroleros de Venezuela, advirtió que el sistema de refinación de Pdvsa está seriamente comprometido por problemas operativos, mantenimiento y falta de crudo por la caída de la producción petrolera venezolana.
Explicó que están paralizadas las operaciones en las refinerías El Palito y Puerto La Cruz, ubicadas en Carabobo y Anzoátegui, además de Isla en Curazao que Pdvsa opera bajo un contrato de arrendamiento con las autoridades locales. Las tres instalaciones industriales tienen una capacidad de procesamiento de 775.000 barriles diarios.
El dirigente de la Futpv refirió que el complejo refinador Paraguaná integrado por las refinerías Amuay y Cardón en Falcón, con una capacidad instalada de 940.000 barriles diarios, solo produce 70.000 barriles/día de combustible, insuficientes para cubrir la demanda del mercado interno que consume 110.000 y 80.000 barriles de gasolina y diesel.
Freites señaló que ante el derrumbe de la actividad de refinación, Pdvsa se ve precisada a importar gasolina para el abastecimiento interno, no obstante, esos volúmenes cada vez son menos por las dificultades financieras de la estatal petrolera y las restricciones de Estado Unidos al gobierno de Nicolás Maduro. “En los muelles de las refinerías de Pdvsa no atracan buquesdesde hace tiempo”, dijo.
Precisó que luego de semanas sin provisión, el sábado llegó un barco a la planta de llenado de combustibles en Carenero, Miranda, proveniente de Madagascar pero “ese cargamento no durará más de 10 días y está destinado a suplir a Caracas, considerada prioritaria por el gobierno, y para atender otras contingencias del régimen”.
Concesionarios de estaciones de servicio del interior del país que solicitaron guardar sus nombres en reserva, alertaron sobre el suministro irregular de combustible por parte de Pdvsa. “Tengo que estirar el inventario y aún así debo cerrar dos o tres días a la semana por falta de gasolina”, dijo uno de los afectados. Otro indicó: “la gente hace cola desde el día anterior para abastecerse de gasolina”.
Dueños de expendios en Caracas aseguraron que en la práctica son objeto de racionamiento. “Antes las gandolas llegaban a diario, ahora es cada dos o tres días sin que Pdvsa de ninguna explicación”, contó el encargado de una bomba en el oeste de la capital.
Un concesionario de una estaciones de servicio en el este indicó que “las gandolas tampoco proveen los volúmenes solicitados: “De 40.000 litros que se pidieron solo nos vendieron 27.000”. Refirió que en Caracas “hasta el momento no se ha repetido la situación de largas colas de vehículos para llenar el tanque.