Estados Unidos rechazó la solicitud de China Mobile de acceder a su mercado de telecomunicaciones por considerar que sus lazos con Pekín amenazan la seguridad nacional, dijeron el jueves autoridades.
La Comisión Federal de Comunicaciones dijo que, debido a que la propiedad y control de China Mobile son del gobierno chino, su acceso a Estados Unidos generaría «sustanciales y serios riesgos para la seguridad nacional y el cumplimiento de la ley».
La decisión, que cierra ocho años de gestiones del gigante chino de telecomunicaciones por hacerse un lugar en Estados Unidos, no fue una sorpresa porque el mes pasado el presidente de la FCC, Ajit Pait, había expresado que estaba en contra. China Mobile es el mayor operador de telefonía del mundo con 930 millones de clientes, a febrero de 2019. En 2011, solicitó permiso para instalarse en Estados Unidos.
La FCC, formada por demócratas y republicanos, dijo en un comunicado que tomó su decisión tras un amplio examen y numerosas consultas a organismos de seguridad nacional y otras agencias gubernamentales. También destacó «la primera instancia en la que agencias del Poder Ejecutivo recomendaron a la FCC denegar … la solicitud debido preocupaciones por la seguridad nacional y la aplicación de la ley».
Tecnológicas chinas como Huawei y ZTE han enfrentado una férrea resistencia de organismos estadounidenses que consideran a esas compañías como amenazas a la seguridad. Washington impidió a Huawei desarrollar en Estados Unidos su red de Internet ultrarrápida 5G y que el gobierno le comprase servicios.