Las opciones para alimentarse siguen reduciéndose con el pasar de los días, debido a los constantes aumentos de precios. Es el turno de los productos lácteos que, a pesar de ser fundamentales en una dieta balanceada, están desapareciendo de la mesa del venezolano.
Desayunar cereal con leche o merendar con un yogur son opciones que los consumidores han tenido que limitar cada vez más. La presentación de 1.8 litros de bebida láctea (el envase especifica que no es leche completa) aumentó 68% en una semana: costaba 7.700 bolívares y ahora tiene un precio de 12.950 bolívares. Los consumidores no pueden pagarlo así que después de revisar el precio vuelven a colocarlo en la nevera que está bien surtida del mismo producto, cuya fecha de vencimiento señala inicios de la semana próxima.
El empleado de un automercado indicó que entre agosto y lo que va de septiembre, la bebida láctea aumentó 3 veces. Los primeros días del mes pasado, el producto llegó a 4.300 bolívares. 10 días después aumentó a 6.700 bolívares, y entre finales e inicios de septiembre subió a 9.300 bolívares.
“Ya no podré comer cereal con leche ni prepararme una merengada, porque estos productos están costosos”, lamentó una consumidora. 900 gramos de leche semidescremada en polvo cuestan 53.743,87 bolívares. “¿Cómo me voy a comprar esa leche si gano 26.100 bolívares a la semana?”, se preguntó una consumidora, que confesó que solo puede comer una vez al día. Este precio nuevo resulta más alarmante si se compara con lo que costaba el producto hace solo cinco meses: 17.320 bolívares; es decir, un alza de 210%.
“Yo entiendo que las cosas tienen que aumentar, pero esto es una exageración”, aseguró otra usuaria, mientras veía el precio de una bebida láctea en un supermercado ubicado en El Cafetal.
Las personas también han tenido que despedirse del yogur. Una mujer redujo drásticamente el consumo de este producto: anteriormente compraba un litro cada quincena y empaques pequeños, pero ahora solo puede comprarse uno de la presentación pequeña al mes.
El de 125 gramos aumentó 51% en 6 meses: antes costaba 1.853 bolívares y ahora tiene un precio de 2.800 bolívares. “Antes me compraba 12 yogures pequeños y ahora solo puedo llevarme uno”, comparó una consumidora.
Un yogur de 750 gramos cuesta 7.624,50 bolívares y uno de 1.600 gramos, con trozos de frutas, tiene un precio de 27.135 bolívares. Un trabajador de un supermercado ubicado en El Cafetal aseguró que los precios de estos productos aumentan prácticamente cada 10 días.
“Antes me comía tres yogures pequeños a la semana y ahora solo dos al mes. El dinero no me alcanza”, aseguró una usuaria. Dijo que su esposo y ella rinden la leche lo más que pueden, pero la de polvo termina durándoles una semana como máximo y la leche líquida no más de tres días.
Todos los productos lácteos reciben el impacto de los aumentos. La leche descremada pasó de costar 4.950 bolívares a tener un precio de 7.950 bolívares en 4 meses: un aumento de 61%.
La crema de leche, una opción fácil para untar el pan o una galleta, aumentó 2 veces en agosto en el mismo establecimiento. Ahora tiene un precio de 5.557,70 bolívares, cuando hace 4 meses costaba 3.250 bolívares, lo que significa un alza de 71%. Un envase de 500 gramos de crema de leche cuesta 9.954,15 bolívares.
La mantequilla y margarina escasea en un supermercado en El Cafetal. Sin embargo, en un establecimiento en Los Palos Grandes el empaque de 500 gramos de mantequilla con sal cuesta 4.730 bolívares, 430 bolívares más de lo que costaba hace una semana.
Las cosas se pusieron más difíciles para las personas que practican la repostería. La leche condensada de 395 gramos tiene un precio de 16.395 bolívares y la leche evaporada entera de 410 gramos cuesta 12.700 bolívares.
Todos los componentes están por las nubes
Roger Figueroa, presidente de Cavilac, explicó que la leche en polvo está llegando en esos precios, entre otros gastos, porque la materia prima nacional aumenta con regularidad y porque los empaques son importados.
“El precio final es el resultado de la sumatoria de diversos componentes: la materia prima, el transporte, el empaque importado, la nómina, la utilidad y gastos de comercialización y de la fábrica”, explicó.
Las industrias lácteas compran la materia prima a productores nacionales por 3.000 bolívares cada litro en zonas como Zulia y Barinas. “Este precio ha subido muchísimo en lo que va de año. Hace 3 semanas costaba 1.500 bolívares”, aseguró. Después debe transportarse hasta la fábrica, donde comenzará el proceso de pasteurización y de transformación para convertirla en polvo.
Figueroa indicó que el empaque del producto es importado. “Pero hay escasez de empaques, ya que la cantidad que llega al país es reducida porque hay pocos dólares”. Esto impide que haya mayor número de productos en los supermercados.
“Yo me pregunto cómo me voy a comprar esa leche si gano 26.100 bolívares a la semana. Esta situación me está afectando mucho, tanto que solo puedo comer una vez al día”
Consumidora