ECONOMÍA

Líderes de la UE presionan a Johnson por avances en negociaciones posbrexit

por Avatar AFP

Los máximos líderes de la Unión Europea (UE) advirtieron el miércoles al primer ministro británico, Boris Johnson, que el bloque continúa interesado en un acuerdo sobre la relación posbrexit pero no a cualquier precio.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó en Twitter que la UE «está trabajando para un acuerdo, pero no a cualquier precio». «Las condiciones deben ser justas. Aún hay mucho trabajo por delante».

En tanto, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, apuntó en Twitter que él y Von der Leyen presionaron «nuevamente por progresos en la mesa de negociación».

Von der Leyen, Michel y Johnson participaron el miércoles en la tarde en una videoconferencia, en una tentativa de hallar una vía para desatascar las negociaciones sobre como será la relación entre Bruselas y Londres una vez consumado definitivamente el Brexit.

Boris Johnson declaró por su parte que un acuerdo comercial posbrexit era «deseable», aunque expresó «su decepción por no haber logrado más avances en las últimas semanas».

Johnson añadió que «esperaba con impaciencia los resultados de la cumbre europea», indicó Downing Street en un comunicad., Añadió que el dirigente «reflexionaría antes de presentar las próximas etapas para el Reino Unido».

La videoconferencia ocurrió en la víspera de una Cumbre de la UE, prevista para jueves y viernes en Bruselas y cuya agenda en gran parte está centrada en el resultado de esas negociaciones.

Plazo

El propio Johnson había mencionado el 15 de octubre como plazo máximo para determinar si aún valía la pena insistir en un acuerdo con la UE o enfrentar una ruptura total sin un acuerdo.

El Reino Unido se retiró de la UE el 31 de enero de este año pero continuará aplicando las normas europeas de comercio hasta el 31 de diciembre, en el llamado período de transición.

De esa forma, Bruselas y Londres ahora discuten como será la relación a partir del próximo 1 de enero.

Así, cualquier acuerdo posible debería ser sellado aún en octubre como máximo para dar tiempo a que el documento sea ratificado antes del 31 de diciembre por Londres y las 27 capitales europeas que conforman el bloque.

En caso de que no sea posible, las relaciones serán pautadas por las normas de la Organización Mundial de Comercio, escenario que todas las partes afirman querer evitar.