Carlos Larrazábal, presidente de Fedecámara, afirmó este jueves que los «precios acordados» en la gaceta oficial no consideran los costos de producción de los alimentos.
«Hay una gran cantidad de productos que no están ni siquiera cumpliendo los costos de las materias primas, que tienen que ser analizados, y otros que ni siquiera fueron consultados con los productores como estaba planteado y a pesar de que no hubo acuerdos en las mesas de trabajo realizadas se publicaron precios», aseguró el presidente de la organización para Unión Radio.
La reunión realizada por Nicolás Maduro para la planificación de ajustes de precios solo convocó un grupo pequeño de productores que, a juicio de Larrazábal, no son las cámaras que representan a todo el universo de producción nacional. Esta situación genera impactos laborales, cambiarios y fiscales en las empresas que no fueron consultadas, explicó Larrazábal.
Uno de los casos más destacados fue el precio fijado para el kilo de carne, que será de 90 bolívares soberanos, pero el establecimiento de este precio no fue consultado con la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga) ni con »ninguno de los productores de la carne».
Fueron publicados en gaceta los precios de productos que no estaban regulados como la mantequilla, que costará 42 bolívares soberanos los 500 gramos, la sal, que tendrá un costo de 13 bolívares el kilo, y la salsa de tomate, con un valor de 36 bolívares los 400 gramos.
Aseveró que deben aplicarse mejores medidas de financiamientos porque las subastas de dólares por Dicom no son suficientes, a pesar de que el gobierno ha reconocido sus fallas en las medidas económicas.
Larrazábal también fijó posición con respecto a la detención de los gerentes de los supermercados Plan Suárez en Caracas, que fueron detenidos por subir los precios. »Estas acciones crean angustia e inseguridad jurídica en empresas que buscar evitar su descapitalización por la falta de valor de reposición».
Con información de Unión Radio.