La inflación de la eurozona escaló cinco décimas en junio y se situó en 8,6% en tasa anual, según los datos preliminares publicados este viernes por la oficina de estadística comunitaria Eurostat.
Junio se convierte en el mes con una mayor inflación interanual en lo que va de año, después de que el aumento de los precios fuera de 5,1% en enero, de 5,9% en febrero, de 7,4% en marzo y abril y de 8,1% en mayo.
Sin embargo, la inflación subyacente, que excluye la energía y los alimentos frescos por tener unos precios más volátiles, se situó el mes pasado en 3,7%, lo que supone una disminución de una décima respecto al mes de mayo.
La energía repitió en el sexto mes del año como principal factor del incremento de los precios, con una tasa anual de crecimiento de 41,9% que representa un aumento de más de dos puntos en comparación con el mes anterior.
Por su parte, el precio de los alimentos procesados, el alcohol y el tabaco aumentó 8,2% en junio (frente a 7% de mayo), mientras que el de los alimentos no procesados se incrementó en más de dos puntos, desde el 9% de mayo al 11,1 % en el pasado mes.
Por otro lado, el precio de los bienes industriales no energéticos aumentó una décima en junio, hasta 4,3%, mientras que el incremento del precio de los servicios fue el mes pasado una décima menor que el anterior (3,4% frente a 3,5% de mayo).
Los tres países del Báltico fueron de nuevo los socios de la moneda común con mayores tasas de inflación en junio, con Estonia a la cabeza (22%), seguido de Lituania (20,5%) y Letonia (19%).
El grupo de países con una inflación de dos dígitos se completa con Eslovaquia (12,5%), Grecia (12%), Eslovenia (10,8%), Bélgica (10,5%), Luxemburgo (10,3%) y España (10%).
Fuera de este grupo, pero con una inflación superior a la media, se sitúan Países Bajos (9,9%), Irlanda (9,6%), Chipre (9,1%), Portugal (9%), y Austria (8,7%).
Por último, por debajo del promedio de la zona euro se situaron Italia (8,5%), Alemania (8,2%), Finlandia (8,1%), Francia (6,5%) y Malta (6,1%).