El encaje legal vigente de 100% decretado por el Banco Central de Venezuela ha traído como consecuencia la limitación del financiamiento de las tarjetas de créditos y de la cartera crediticia en general, de acuerdo con lo que denuncia la Federación de Trabajadores Bancarios.
El encaje legal es la porción de depósitos que las instituciones financieras deben reservar y que en la actualidad asciende a la misma cantidad del dinero que reciban. Estos fondos incluyen todos los recursos en efectivo para efectuar cualquier tipo de operaciones bancarias.
“El hecho de que cada entidad financiera mantenga represados los recursos recibidos disminuye las posibilidades de la creación de dinero, vulnerando así su principal actividad. Las instituciones necesitan recursos para invertir y financiar sus proyectos, además de la función social que les asiste. De allí que el aumento del encaje legal genera resultados negativos para el sector financiero, con su correspondiente incidencia en la vida económica del país”, asegura Fetrabanca en una nota de prensa.
La medida del BCV afecta a los empresarios, de acuerdo con lo que explica Claudio Rivas, secretario general de la Federación, pero también a los clientes pequeños. “Si bien es cierto que la hiperinflación registró una desaceleración durante los meses de febrero y marzo respecto a la tasa de inflación que se experimentó a finales de 2018, ello no significa que existe un control institucional de este fenómeno. Al contrario, se observa la presencia de una “camisa de fuerza” que por momentos intenta controlar el valor del dólar paralelo sin lograr resultados positivos, tomando en cuenta los incrementos que se producen en forma sistemática con sus consecuencias en la vida diaria”.
Rivas llamó la atención sobre la incidencia negativa que este hecho ejerce en el sector de trabajadores de la banca, que aprecia cómo merman los depósitos de los clientes tradicionales creando un clima de zozobra e incertidumbre que en nada beneficia la dinámica de la economía nacional. La solución a problemas de rentabilidad amerita que la entidad financiera atienda una serie de elementos (margen de operaciones, manejo de activos y uso rentable de la deuda) siguiendo la premisa de que el costo de capital requiere ser inferior al rendimiento de los activos.