Celso Fantinel, primer vicepresidente de Fedeagro, advirtió que, de acuerdo con cálculos del sector, en el país no hay más de 130.000 hectáreas de maíz.
“El campo está muriendo de la mano de este gobierno. De seguir así, va a fenecer”, afirmó Fantinel este martes en entrevista con Román Lozinski en el Circuito Éxitos.
El representante de Fedeagro denunció que al país llegaron semillas para sembrar más de 160.000 hectáreas de maíz. Sin embargo, presumen que terminaron en manos de empresas y productores afectos al oficialismo.
“Los últimos tres años la hemos pasado muy mal con los costos, y ahora pretenden que salgamos a competir. Nos quieren vender los insumos a precios internacionales”, destacó.
Fantinel aseguró que desde 2014 Agropatria ha disminuido y desmejorado su producción. Esta empresa estatal era de capital español y se conocía como Agroisleña.
En relación con la dotación de frutas y hortalizas para la capital y la zona norte del país, destacó que sectores como El Jarillo, El Junquito y los Andes, tradicionales proveedores de estos rubros, trabajan a 25% de su capacidad.
A pesar de este panorama, Fantinel señaló que es optimista con respecto al futuro, pues los agricultores privados están dispuestos a seguir invirtiendo en el país, siempre y cuando el gobierno de turno ponga de su parte.
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