La escasez de efectivo regresó y golpea tanto al sector comercio y transporte, como a quienes tienen que salir de sus hogares a realizar sus diligencias.
Ciudadanos consultados por La Prensa de Lara aseguraron tener poco acceso a los billetes devaluados, pues con la semana de la radicalización por la pandemia, los bancos permanecen cerrados. Pero durante la flexibilización, los montos que dan las entidades no superan los 200.000 bolívares.
«Todo está difícil porque ante la falta de efectivo las ventas se hacen complicadas», dijo Javier Salcedo al medio regional.
Salcedo es vendedor informal en el centro de Barquisimeto y señaló que, a pesar que vende una bolsa de suspiros en 50.000 bolívares, a las personas les cuesta salir de su efectivo porque prefiere dejarla para otras prioridades.
Los transportistas también están incluidos en la lista de los afectados por la falta de efectivo en la calle, pues aseguran que hay personas que no tienen para cancelar el pasaje completo.
«Entendemos la situación y muchas personas en medio de la pandemia no están ni trabajando y con lo que recibimos, así sea el pasaje incompleto, podemos resolver algo», dijo Juan Espinoza, colector de una línea de transporte público.