En una corte federal del Sur de la Florida fue presentada una demanda que alega que Nicolás Maduro mantiene bajo su control un pequeño banco de Miami, el Eastern National Bank, que habría usado para evadir las sanciones de Estados Unidos contra su régimen.
Los accionistas minoritarios del Eastern National Bank fueron quienes introdujeron la demanda alegando detalles de la asociación con el chavismo. Dicen que 99% de las acciones del banco pertenecen a la empresa Mercorp, inscrita en Curazao y que corresponde a la compañía venezolana Corpofin. Esta fue intervenida y permanece bajo control del régimen de Caracas.
Entre quienes figuran en la demanda introducida en enero está Gabina Rodríguez, quien presidió el directorio de la entidad entre 2015 y 2021. Rodríguez fue nombrada por las autoridades chavistas como la interventora de Corpofin.
“Rodríguez es un agente del sancionado régimen de Maduro en Venezuela, y mientras se mantenga en completo control del Eastern National Bank, el régimen de Maduro tendrá acceso al sistema financiero de Estados Unidos, permitiéndole a Maduro evadir las sanciones de la OFAC”, señala la demanda.
Las sanciones prohíben a compañías y ciudadanos en territorio estadounidense realizar negocios con funcionarios o entidades a menos que cuenten con una licencia especial del Departamento del Tesoro.
Los accionistas minoritarios alegan que los directores de Eastern National Bank incumplieron con sus obligaciones fiduciarias. Con esto han provocado daños al banco y perjudicando el valor accionario de la institución.
Los demandados, aunque reconocen la singularidad de la composición accionaria del banco, niegan que esto implique estar bajo control del régimen de Maduro. Enfatizan que el banco consiguió los permisos de la OFAC para operar en Estados Unidos con la actual estructura accionaria.
“La corte no debe y no puede ponerse el sombrero de regulador bancario”, señala uno de los documentos presentados en la corte por los demandados. Otros de los señalados, además de Rodríguez, son Louis Ferreira, César Gómez, Keith Parker, Carlos Rodríguez y Gustavo Macías, directores y exdirectores del banco.
Destacaron que las licencias de la OFAC “son suficientes para demostrar que la relación accionaria mayoritaria fue aprobada por la agencia reguladora apropiada (y) los demandantes no pueden hacer uso de esta acción para impugnar la validez de la conducta de la junta directiva… cuando esa conducta ha sido expresamente autorizada por la correcta agencia del poder ejecutivo”
Además dicen que la posición accionaria de los demandantes, que apenas alcanza 1%, es insignificante.
La pieza de Maduro en el Eastern National Bank
En la queja introducida por los demandantes se delinea claramente la relación de Gabina Rodríguez con el régimen de Maduro.
Explican que Maduro la nombró en 2009 como receptora de Corpofin, otorgándole control total de Mercorp. Por esto Rodríguez puede nombrarse a ella misma como la directora gerente única de Mercorp, dueña del bloque mayoritario de Eastern. Esto también le permite a la firma tener los votos necesarios para elegir a los integrantes de la junta directiva, dijeron en la demanda.
Rodríguez es una funcionaria pública de larga data en Venezuela, con 30 años de trabajo en la burocracia del país. Fue parte del Banco Industrial de Venezuela en la década de los noventa y luego aterrizó en la Contraloría General de la República, de donde salió en 2002 para recalar en el Ministerio de Transporte y Comunicaciones.
Las jugadas oscuras del Eastern
La demanda explica que el Eastern National Bank ayudó a Caracas a mantener el acceso al sistema financiero internacional cuando «todos los bancos estadounidenses» cerraran la relación de banco de corresponsalía que mantenían con el Banco de Venezuela al abrir y mantener ese tipo de cuenta con el banco estatal.
La decisión le generó problemas al Eastern National Bank después de que la Contraloría de la Moneda, del Departamento del Tesoro detectó en 2018 una serie de deficiencias en las prácticas antilavado y en las relacionadas con el secreto bancario con la cuenta del Banco de Venezuela.
La Contraloría identificó 10 relaciones de cuenta con «insuficiente información de diligencia debida». El ente le ordenó al banco nombrar un Comité de Observancia de tres directores, dos de los cuales no podían ser empleados, ejecutivos o accionistas del banco.
Los demandantes dicen que el banco no adoptó los correctivos y que eso fue sentado por la Contraloría en otra advertencia del 2020.
Con información de El Nuevo Herald.
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional