Celia Escalona tiene 50 años de edad y es una pequeña agricultora que vive en el sector José Rafael Gabaldón, ubicado en la parroquia Cuara del estado Lara.
Aprendió a sembrar con sus padres. Lo hace en un pequeño conuco que tiene en el patio de su casa. En él, cultiva alimentos para los cuatro miembros de su familia. No obstante, en los últimos años, su situación había cambiado.
“Los últimos diez años han sido difíciles –explica–debido a la situación económica del país, y a esto se suma la pandemia. En mi caso, conté con el apoyo de varios familiares en los momentos en que no contábamos con muchos alimentos. Desde que comencé a participar del proyecto, han cambiado las cosas. He podido sembrar y alimentar mejor a mi familia”.
Buscando formas de garantizar la alimentación de su familia, Celia adquirió y cría varias ovejas y chivos de los que obtiene proteína de origen animal para el sustento de los suyos. Un alimento que ahora se ve complementado con las verduras y las hortalizas que obtiene de su conuco.
- Giovanni Angulo: “Yo seguiré sembrando hasta 1.000%, mientras tengamos la labor de ayudar”
- El estudiante que produce alimentos para su escuela
Celia y el proyecto de la FAO
Celia es una de los 720 beneficiarios del proyecto: “Promoción de la Seguridad Alimentaria y Nutricional, en los niños en edad escolar y sus familias, mediante la asistencia nutricional con apoyo de la producción proveniente de la Agricultura Familiar a pequeña escala” que FAO Venezuela ejecuta en varios estados del país con recursos financieros de la Unión Europea.
El proyecto que se ejecuta en Cuara, hace acento en la Escuela Técnica Agrícola José Ramón Rodríguez, alcanza a otras siete escuelas de inicial y primaria del municipio Jiménez y cuenta con la asesoría técnica de la FAO, busca fortalecer el Programa de Alimentación Escolar (PAE), por medio del consumo de alimentos autóctonos, cosechados en las tierras cercanas a la escuela por productores locales. Por otra parte, ofrece asistencia a los agricultores para la producción y el almacenamiento de semillas y alimentos.
De esta forma se pretende la complementariedad de los menús que suministra el PAE a través de la compra directa de alimentos frescos provenientes de la Agricultura Familiar local y la producción propia de alimentos en terrenos de las Escuelas Técnicas.
Sembrar para vivir
Celia cree que la ayuda que recibió de FAO en forma de semillas y herramientas, así como la asistencia técnica, le otorgan insumos y conocimientos para fomentar en su familia la siembra y cosecha de alimentos sanos.
“Voy a continuar sembrando y sé que voy a estar bien. En los talleres que nos dieron he aprendido muchas cosas importantes, como lo es la producción de alimentos caseros para darle una alimentación a menor costo a nuestras gallinas y facilitar su mantenimiento”, señala Celia.
Celia sabe que ahora su patio produce alimentos para su familia, pero también para los niños de su comunidad que asisten a la ETA. Pienso que “sembrando es la mejor manera de mejorar la situación general del país, y la mía propia”.
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional