Ante la nueva fiscalización de los comercios para verificar el cumplimiento de los precios, Leonardo Palacios, presidente de la Cámara de Comercio de Caracas, aseguró que insistir en controlar los precios constituye un golpe para la industria.
En medio de la difícil situación económica que atraviesa Venezuela, la medida anunciada esta semana por el Ministerio de Comercio afecta a la industria que sigue operando y generando empleos en el país.
“En un proceso hiperinflacionario con constantes devaluaciones de la moneda, el hecho de que cada empresa haya tenido la posibilidad de producir y vender sus bienes y servicios, haciendo un manejo responsable de su flujo de caja y fijando precios que permitan cubrir los costos de producción y reponer las materias primas o mercancías, según sea el caso, es lo que ha permitido que las pocas empresas y comercios sigan en pie, ofreciendo distintas opciones y posibilidades para elección del consumidor venezolano”, aseguró.
Palacios recordó que los venezolanos tienen amplia experiencia con los controles de precios. Se sabe que dichas medidas no funcionan porque generan escasez y desvían productos al mercado negro.
“Volver a los controles de precios no es la solución a la complicada situación económica que enfrentamos. Los productos se mantienen o regresan al anaquel cuando las empresas tienen la posibilidad de fijar sus precios en función de sus costos”, agregó.
El representante de la cámara considera que las autoridades deben concentrarse en estabilizar la economía. Así como ofrecer condiciones para la inversión privada y el fortalecimiento de la producción nacional, tomando en cuenta el impacto que tuvo la pandemia y la hiperinflación en el sector empresarial del país.
Para concluir, Palacios insistió en que lograr una industria nacional consolidada y un sector comercial sólido es la única vía para que los venezolanos puedan tener acceso a bienes, productos y servicios de calidad.