No le ha sonreído la suerte a Rafael Nadal en el sorteo de Wimbledon. Al español, segundo cabeza de serie en el All England Club, le ha caído un cuadro lleno de cañoneros, bombarderos y en el que no hay ronda fácil.
El debut será el martes contra el argentino Francisco Cerúndolo, a priori el compromiso más sencillo de todos, porque el mayor de los hermanos Cerúndolo solo ha ganado un encuentro en hierba en su carrera. De hecho, solo ha jugado seis partidos en esta superficie, tres de ellos en la previa de Wimbledon el año pasado.
Esta temporada ganó en su debut en Queen’s a Pedro Martínez, su primera victoria oficial sobre pasto en su vida, antes de perder con Ryan Peniston y de caer también en Eastbourne ante Tommy Paul.
Los problemas vienen después de la primera ronda. En segunda, a Nadal podría esperarle Sam Querrey, todo un sacador y semifinalista aquí en 2017. El estadounidense, venido a menos en las dos últimas temporadas en las que ha llegado a salir de los primeros 100 del mundo, ya sabe lo que es medirse a Nadal en Wimbledon y es que se enfrentaron en los cuartos de final de 2019, con triunfo en tres sets para el manacorense.
Querrey, de 34 años, ha sido el matagigantes en Wimbledon en las últimas ediciones y se cargó en 2016 a Novak Djokovic y en 2017 a Andy Murray. Su peligro está fuera de toda duda, por mucho que Nadal domine el cara a cara por 5-1.
El tercero en la lista es Lorenzo Sonego, que ha destacado más en tierra batida en su carrera, pero que ha llegado a jugar dos finales en hierba, una con victoria en Antalya 2019 y otra con derrota, en Eastbourne 2021. El transalpino tiene como tope la tercera ronda en Wimbledon del año pasado, cuando cedió ante Roger Federer.
A partir de octavos, el camino de Nadal se empina aún más. Marin Cilic sería el hipotético rival por ránking. El croata, finalista en Wimbledon en 2017, posee 80 triunfos sobre esta superficie y tres títulos, dos en Queen’s, donde este año hizo semifinales, y uno en Stuttgart. Aunque a sus 33 años ha sufrido un bajón de juego y las lesiones le han atenazado, Cilic, aún dentro de los 20 primeros, es un rival que con su saque y su derecha puede eliminar a cualquiera en Wimbledon. Con Nadal posee un cara a cara negativo de 2-7.
En cuartos, Felix Auger-Aliassime es el hombre a tener en cuenta. El canadiense es uno de los tres hombres que ha sido capaz de llevar a cinco sets a Nadal en Roland Garros. En hierba, aunque solo ha jugado 30 partidos, ha sido capaz de alcanzar dos finales, en Stuttgart 2019 y 2021 (ambas perdidas) y unos cuartos en Wimbledon el año pasado. Su punto débil es el plano mental y los nervios, no en vano perdió las ocho primeras finales ATP que disputó.
Para las semifinales, palabras mayores. Los favoritos son Stefanos Tsitsipas, con mucho que demostrar en Wimbledon, donde en las dos últimas ediciones no ha pasado de primera ronda y donde aún no ha alcanzado los cuartos de final, y Matteo Berrettini, finalista el año pasado y hombre a batir en la hierba.
El italiano posee un brillante 31-3 en la superficie desde 2019 y ha ganado cuatro títulos en ella, dos en Queen’s y dos en Stuttgart.
Además de estos dos, Nick Kyrgios, que venció a Nadal aquí en 2014, y Denis Shapovalov, semifinalista en 2021, aunque ha perdido sus últimos seis partidos, son otros hombres a tener en cuenta en el cuadro de Nadal, uno de los más difíciles posibles. Para la final, en su hipotético camino estaría Novak Djokovic.