Un día después de celebrar su semana 250 al frente de la clasificación mundial, el serbio Novak Djokovic irrumpió en el Mutua Madrid Open, torneo que ha ganado en dos ocasiones, para derrotar al estadounidense Taylor Fritz, por 6-4 y 6-2 en 65 minutos.
El serbio necesitaba una victoria así de contundente para olvidarse de la irregularidad que ha demostrado tras ganar el Abierto de Australia, y pasar luego sin demasiados éxitos por los tres primeros Masters 1.000 de la temporada, Indian Wells, Miami y Montecarlo, en este último siendo derrotado por el ruso Daniil Medvedev en cuartos de final.
«Me da mucha alegría y estoy contento de estar aquí otra vez otro año, para mejorar mi español», dijo el serbio en castellano a pie de pista, contento por su debut en un torneo que cerrado con victoria en 2011 y 2016, y en el que lleva ya 25 partidos ganados y solo ocho derrotas.
«Estoy obviamente muy orgulloso y feliz por jugar este deporte. Es increíble y quiero continuar así», comentó al serle preguntado por lo que sentía por las 250 semanas como número uno.
«Necesito jugar más tenis en general, una hora y media más de tenis mañana, para seguir a este nivel», añadió el de Belgrado, que tendrá el miércoles libre para preparar su duelo de tercera ronda. En principio, vencer a Fritz, cuarto finalista en Auckland este año, y verdugo del búlgaro Grigor Dimitrov en su estreno en Madrid, no era tarea fácil, pero el saque de Djokovic funcionó a lo grande, cediendo nada más que ocho puntos. Y con ese porcentaje, Fritz apenas pudo hacer daño al número uno de la ATP.