La expectativa crece cada vez más por el segundo combate entre Deontay Wilder y Tyson Fury, correspondiente al título de los pesos pesados, que se celebrará el sábado en Las Vegas.
La revancha entre el campeón estadounidense y el retador inglés es uno de los pleitos más esperados de 2020 en el deporte de las narices chatas luego del polémico empate de la primera pelea entre ambos en diciembre del 2018.
En la primera confrontación, Wilder tumbó dos veces a Fury, pero no pudo sacar ventaja en las tarjetas, que reflejaron un 115-111 para el campeón, un 114-110 a favor del británico y una tercera votación 113-113. La paridad le permitió a ambos conservar el invicto y Wilder pudo retener el cinturón del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
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Rueda de prensa a empujones
Como es de suponer, la segunda batalla es muy esperada por los dos púgiles, quienes se empujaron y se insultaron mutuamente en la rueda de prensa de este miércoles. “Nunca se te olvide quien te trajo de vuelta al boxeo grande”, le echó en cara Wilder a Fury en alusión al regreso del nativo de Manchester luego de una inactividad de dos años por abuso de drogas y alcohol.
Al margen de lo que suceda el sábado en Las Vegas, los dos boxeadores se podrían enfrentar una tercera vez, pues hay una cláusula en el contrato de la pelea que le da la posibilidad al derrotado de pedir la revancha.
Wilder tiene foja de 42 victorias y un empate con 41 nocauts y Fury registra 29 lauros y un armisticio con 20 rivales despachados por la vía del sueño.