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Stéphanie Frappart hace historia como árbitra en Qatar

por Avatar AFP

Carismática y respetada, la francesa Stéphanie Frappart arbitrará el jueves el choque entre Alemania y Costa Rica del Mundial de Qatar, con un boleto en juego a los octavos de final. Con esto, rompió la última barrera que le faltaba en su pionera carrera en el fútbol.

Stéphanie Frappart ya fue la primera mujer en dirigir en la liga masculina de fútbol francesa y en la Liga de Campeones de la UEFA. Ahora, liderará un equipo arbitral completamente femenino, del que también formará parte la mexicana Karen Díaz como asistente.

A sus 38 años, Frappart participará en el máximo torneo del fútbol masculino culminando un trepidante ascenso desde su debut en la Ligue 1 en 2019.

Ese mismo año fue nominada para dirigir la Supercopa de Europa, en 2020 lo hizo en la Liga de Campeones y en 2021 en la Eurocopa.

«Es una gran evolución, un reconocimiento de mis cualidades y competencias. Esta es mi línea de conducta desde el principio. Me eligen por mis competencias, no por mi género», recalcó la francesa en un encuentro con medios antes de la última Eurocopa.

Con ese recorrido, a pocos les sorprendió que Stéphanie Frappart estuviera entre las primeras árbitras en participar en una Copa del Mundo masculina.

«Un Mundial es lo máximo, la mayor competición del mundo», reconoció la francesa en septiembre tras ser nombrada como parte del cuerpo arbitral.

«Ha hecho docenas de competiciones internacionales. Sabe perfectamente cómo gestionar un evento intercontinental«, la alabó Clement Turpin, el otro árbitro francés presente en Doha.

Árbitro desde los 13 años

En su camino hacia el partido del jueves, Frappart cumplió con todos los pasos desde sus comienzos en el arbitraje en 1996. 

«Al principio era una pasión. Yo no tenía la vista puesta en la Ligue 1 ni en ninguna otra competición», recuerda.

Antigua jugadora del AS Herblay, en la región parisina, Frappart arbitra desde los 13 años y pasó cinco temporadas en la segunda división.

En la Ligue 1 no tardó en ganarse elogios unánimes tanto de jugadores como de entrenadores.

«Tiene mucha diplomacia. Y cuando eres entrenador, hombre, y estás bajo presión, nos enojamos… Pero solo hace falta que ella te mire, te sonría, un gesto… y se acaba», dijo de ella en 2019 Christophe Galtier, actual entrenador del París Saint-Germain y entonces del Lille.

«Es una mujer con una calma y serenidad impresionante, es difícil desestabilizarla. Tiene una madurez increíble«, señaló a la AFP el presidente de la comisión federal de árbitros francesa, Eric Borghini.

«Ya forma parte del paisaje» para los jugadores, acostumbrados a verla con el silbato, apuntó. «Pienso que la consideran igual que un hombre, si pueden engañarla, no dudarán en hacerlo».

Jürgen Klopp también alabó su forma de arbitrar, diplomática y serena, después de la final de la Supercopa de Europa de 2019 que el Liverpool ganó en penales al Chelsea.

«Le dije al equipo arbitral después del partido que si hubiéramos jugado como ellas pitan, habríamos ganado 6-0», dijo Klopp. «Esa fue mi opinión absolutamente. Han hecho un partido brillante».

«Dar la oportunidad»

Desde su aparición en la élite, a Frappart le suelen preguntar sobre su recorrido en el fútbol masculino y sus respuestas son, como su forma de arbitrar, diplomáticas pero firmes.

«Siempre hice campaña para que se nos tenga en cuenta por nuestras capacidades y no necesariamente por nuestro género. Si las mujeres tienen cualidades, también hay que darles la oportunidad de llegar», recalcó.

«Desde 2019, dimos un gran paso adelante. Ahora no es una sorpresa ver a mujeres arbitrando a hombres, sin importar el continente o el país», explicó en septiembre.

A la jueza, oriunda de Val-d’Oise, tampoco le preocupa que su estreno ocurra en Qatar, un país especialmente cuestionado por los derechos de la mujer desde su nominación como sede mundialista, donde dijo que fue «siempre bien recibida».

«Esto es también una fuerte señal de las instancias (deportivas) de que hay mujeres en este país», afirmó. «No soy una portavoz feminista, pero sí puede ayudar a las cosas… Sé que a menudo desempeñamos un papel, especialmente en el deporte».