El estadounidense Fred Kerley, campeón del mundo el pasado año en Eugene, y el italiano Marcell Jacobs, campeón olímpico en Tokio, quedaron eliminados en las semifinales de los 100 metros lisos y no estarán entre los ocho finalistas que pelearán por las medallas en el Centro Nacional de Atletismo de Budapest.
Kerley, de 28 años, llegó a Budapest con la intención de revalidar su corona de los 100 metros e incluso de rebajar su mejor marca personal (9.76) para acercarse a Usain Bolt (9.58), pero no será posible porque en las semifinales cayó eliminado.
El velocista estadounidense, que compitió en la tercera serie de semifinales, paró el crono en 10.02, un registro que le hizo quedar tercero y, por tiempos, tampoco le permitió acceder a la final.
Marcell Jacobs, lastrado por las lesiones esta temporada, aterrizó en Budapest con solo una carrera al aire libre en sus piernas este curso. Fue el pasado 7 de junio, en el Mitin de París, y concluyó séptimo con un tiempo de 10.21.
Sin muchas esperanzas puestas en este Mundial, el italiano sufrió en la primera ronda y en la semifinal, en la serie uno, quedó quinto con un tiempo de 10.05.
El más rápido de todos los semifinalistas fue el principal favorito al oro, el estadounidense Noah Lyles, que registró 9.87, su mejor marca de la temporada.