El venezolano Salvador Pérez conectó su jonrón 41 el domingo, tras pegar dos el sábado, y está muy cerca de romper un récord de cuadrangulares para receptores en las Grandes Ligas.
Tras volarse la cerca tres veces en los últimos dos partidos de la serie contra los Medias Blancas, Pérez está a siete bambinazos de igualar el récord de jonrones de los Reales en una temporada establecido por el cubano Jorge Soler en 2019, con 26 encuentros restando en el calendario del equipo.
Pérez también se unió a una corta lista de receptores con 40 o más vuelacercas en un año.
Por ahora, ocupa el segundo puesto en las Mayores en la lista de jonrones de 2021, dos por debajo del candidato al Jugador Más Valioso de la Liga Americana y superestrella de los Angelinos Shohei Ohtani. Pérez también está presentando argumentos para recibir votos al JMV.
“Muchísimo. Yo sé todo el trabajo que hice durante la temporada muerta. Desde octubre hasta el último día que volé a Arizona para el Spring Training. Jamás pensé que podía hacer lo que estoy haciendo ahora. Estoy bendecido para poder estar haciendo todo esto”, respondió Pérez cuando le preguntaron qué significaban 40 jonrones para él.
Entre los jugadores que han disputado al menos 75% de sus juegos en la receptoría, solo Jonny Bench (45 en 1970) y el puertorriqueño Javy López (43 en 2003) han conectado más vuelacercas que Pérez, que con sus 41 está empatado con Todd Hundley (1996) y Roy Campanella (1941).
Pérez es el octavo jugador venezolano que conecta 40 o más jonrones en una temporada, uniéndose a una lista que completan Andrés Galarraga (tres veces), Miguel Cabrera (dos), Eugenio Suárez, Ronald Acuña Jr., Carlos González, Richard Hidalgo y Antonio Armas. Suárez tiene el récord en una campaña con los 49 que sacó en 2019.
Pérez, de 31 años años de edad, ha empujado 102 carreras este año y lleva un paso de 121 remolcadas, que serían la mayor cantidad para un jugador con al menos el 75% de sus partidos detrás del plato desde que Mike Piazza impulsó 124 en 1999. Además, sería la mayor cantidad para cualquier pelotero del Joven Circuito que ha jugado al menos el 75% de sus encuentros como receptor desde que Yogi Berra remolcó 125 en 1954.