El tradicional Día de los Reyes Magos lo celebrarán los fanáticos de la pelota venezolana con buen beisbol. En vez de traer oro, incienso y mirra, cada uno de estos personajes de la historia del catolicismo y el cristianismo representará a uno de los tres juegos que se llevarán a cabo en la continuidad de la postemporada de la LVBP.
Con diferencia a lo que fueron las dos primeras jornadas, las series se mudarán a un nuevo recinto, en los que equipos como Leones del Caracas y Navegantes del Magallanes llegan con un mismo objetivo: intentar despachar a sus rivales, que ahora fungirán como locales, en el mínimo de encuentros posibles.
Aunque tanto navieros como melenudos deberán antes emplearse a fondo para lograr su cometido, porque Caribes de Anzoátegui y Tigres de Aragua están decididos a aprovechar sus estadías en casa para revertir sus situaciones.
Cardenales de Lara y Bravos de Margarita, por sus parte, se batirán a duelo para ver cuál de las dos divisas termina inclinando la balanza a su favor luego de la paridad que se suscitó durante los primeros cuatro días de enero en territorio barquisimetano.
A la conquista de oriente. Uno de los careos que genera grandes expectativas será el que sostendrá el Magallanes de visita al estadio Alfonso “Chico” Carrasquel de Puerto La Cruz con Caribes.
La escuadra filibustera exhibió una ofensiva explosiva en su feudo y eso le valió para tomar ventaja 2-0. Un promedio colectivo de .364 los ayudó a castigar al pitcheo de un conjunto indígena, que tuvo que batallar en contracorriente en los dos enfrentamientos anteriores, sin obtener ningún resultado positivo.
Ahora, apoyados en su público, además de con la posible incorporación del slugger Balbino Fuenmayor, la tribu tratará de contener a los temibles bucaneros y cuando menos optar por regresar a Valencia con esperanzas de trascender en los playoffs.
Zarpazos peligrosos. Si bien la disputa entre Magallanes y Anzoátegui luce como la más llamativa, la que protagonizan Leones y Tigres no deja de captar la atención de otro sector de la afición de Venezuela.
Los capitalinos llegan a Maracay arriba 2-0 y con envión anímico tremendo, considerando la manera en la que consiguieron los dos primeros triunfos, dejando tendido en el terreno al adversario.
Sin embargo, los rayados mostraron en lo extenso del campeonato que cuentan con el material y las virtudes suficientes como para sobreponerse de las adversidades y más cuando el bate de Jesús Aguilar empezó a producir como se aguardaba.
En el enfrentamiento de hoy, los melenudos colocarán en el morrito a Luis Díaz para que le haga frente al dominicano Gabriel Pérez, designado por Oscar “Cachi” Salazar para que ayude a los Tigres a retomar el sendero triunfador.
Arde la isla. La serie que en teoría se avizoraba como la más desbalanceada terminó por ser la de mayor paridad después de que Bravos de Margarita no se dejó amilanar por Cardenales de Lara y les ganó en una ocasión, sin contar que estuvo a punto de salir airoso en ambos desafíos y terminar de dar la sorpresa.
En la comodidad de su hogar, esperan darle continuidad al buen accionar que exhibieron en lo extenso de toda la ronda regular y romper con el favoritismo de unos pájaros rojos, que desde la segunda quincena de diciembre han atravesado un leve bajón.
El norteamericano David Kubiak (Bravos) se verá las caras con el venezolano Néstor Molina (Cardenales) en lo que en primeras instancias luce como un duelo de pitcheo, a pesar de que los batazos han reinado en la serie.
A solo un día de que las personas vuelvan a sumirse en la cotidianidad natural de la vida tras la fecha navideña, el deporte por excelencia de la nación obsequiará una cartelera como para pasar la jornada dominical disfrutando de buen beisbol.
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