La fondista venezolana Paola Pérez expresó este martes sentirse feliz de haber quedado entre las mejores 20 en la prueba de aguas abiertas en Tokio 2020 luego de vivir «momentos tormentosos» durante el ciclo olímpico en los que llegó a pensar en atentar contra su vida.
«Fue una mala carrera, pero mientras iba nadando me sentía bien. Pienso en la preparación que tuve y no podía haber tenido un mejor resultado», expresó Pérez en declaraciones a la prensa. Destacó que solo tuvo un mes de preparación.
Aseguró que clasificar a Tokio 2020 fue un gran logro. «Quiero buscar lo negativo de la carrera, pero fue lo mejor que pude hacer después de un ciclo bastante tormentoso, tuve meses fuertes».
Paola Pérez confesó que después de los Juegos Panamericanos Lima 2019, vino lo peor para su vida: «Pensé que me iba a quedar en el camino, que no lo iba a lograr… lo más difícil fue superar los pensamientos suicidas que tuve por dos años después de Lima. Fue un infierno, pero hoy salió el sol y calentó bastante. Hoy me siento feliz de haber superado esos momentos tormentosos».
Y agregó con lágrimas corriendo por sus mejillas: «Las personas que estuvieron conmigo saben lo difícil que fue para mi y el cambio que hice. Obviamente me duele, pero también me siento feliz. No me puedo juzgar nada porque el camino fue difícil pero conté con las personas que me apoyaron al final y espero que se sientan contentos con este resultado».
La tachirense finalizó la competencia olímpica en tiempo de 2:05:45.0. La atleta comenzó en buena forma, fue subiendo posiciones hasta llegar a la casilla número 10. Sin embargo, no pudo llevar el ritmo de las líderes.
El oro quedó en manos de la brasileña Ana Marcela Cunha, cinco veces campeona del mundo, con un tiempo de 1h59:30.8. La medalla de bronce fue para la australiana Kareena Lee con marca de 1h59:32.5.