Este miércoles comienza la final absoluta del fútbol venezolano y en ella no habrá advenedizos. Uno de los protagonistas, Noel Sanvicente, lleva la misión de incrementar su leyenda en nuestro balompié.
El mandamás del banquillo de Caracas es el DT más ganador del torneo local. Sus números son propios de un estratega que en 2019 tiene toda la experiencia en estas batallas.
El primer título que Sanvicente sumó a sus registros fue una final absoluta, en la campaña 2002-2003, contra el Unión Atlético Maracaibo.
Desde allí lo que vino a su currículo fue victoria tras victoria. Suma 3 Torneos Apertura (2003, 2006, 2007), 6 Torneos Clausura (2004, 2006, 2009, 2009, 2013, 2014, 2019) y 7 coronas absolutas (2002-2003, 2003-2004, 2005-2006, 2006-2007, 2009-2010, 2012-2013, 2013-2014).
Por tanto, el nuevo careo en suelo merideño representa un sendero conocido en su carrera y ese es un plus importante para estas instancias.
Caracas FC llega muy fortalecido en lo anímico. Quitar la corona del Clausura a su acérrimo rival, Deportivo Táchira, en los últimos minutos, con ese empate a dos goles del domingo, le da otra perspectiva para encarar esta fase.
Además, los Rojos del Ávila de Noel Sanvicente tienen otra ventaja sobre el cuadro merideño, ya que el conjunto andino tiene menos rodaje por no acceder a la liguilla pasada.
Estudiantes con el fuerte de la localía
Los académicos, por su lado, llegan a este duelo con un elemento no menor para analizar. Para el Torneo Clausura culminaron en la casilla 15 de la tabla, escalafón que no le dio un lugar en la liguilla.
Esta situación impidió a Estudiantes estar compitiendo de la forma que sí lo hizo Caracas.
Sin embargo, su Torneo Apertura lo llevó a ser protagonista de una final, por lo que esa jerarquía podría salir a relucir este miércoles en el estadio Guillermo Soto Rosa.
Allí serán locales y es precisamente una de las armas que tienen a su favor: la afición.
El antecedente de la final del Apertura, en la que metieron en el recinto 38.870 espectadores, no es un dato cualquiera.
Todo lo contrario a Caracas que en la vuelta, el próximo domingo en el Olímpico, no sabrá con qué se va a encontrar. Puede ser que cuente con el apoyo de la hinchada caraqueña como también es posible la ausencia de la fanaticada, situación que ya se vivió en gran parte de la campaña tras las disputas con la directiva y cuerpo técnico.
Está la mesa servida para que este miércoles a las 4:00 pm suene el silbatazo y ponga a la final del fútbol venezolano a vibrar por la búsqueda de un campeón.