El español Rafael Nadal (6) se sobrepuso a la reacción del italiano Matteo Berrettini (7) en el tercer set, tras imponerse por un ajustado 6-3, 6-2, 3-6 y 6-3 y conseguir el billete para la gran final del Abierto de Australia.
“He empezado jugando muy bien. En el tercero él ha ido con todo y yo no he sacado tan bien. Tenemos que sufrir y luchar, y eso es lo que ha pasado en el cuarto”, comentó al ser preguntado por el extenista estadounidense Jim Courier sobre una pista Rod Laver Arena que mantuvo el techo cerrado como consecuencia de una fuerte tormenta acompañada de abundantes lluvias que azotó Melbourne.
Su rival para la final se conocerá tras la conclusión de la segunda semifinal que se disputará en la misma jornada y que enfrentará al ruso Daniil Medvedev (2) con el griego Stefanos Tsitsipas (4).
El plan de Nadal cuajó a cla perfección en los primeros compases ante un Berrettini incapaz de encontrar respuestas a la persistencia del español sobre su revés.
El de Manacor retomó en la primera manga su mejor versión al servicio, después de cometer su particular récord de dobles faltas ante Shapovalov, y mantuvo un positivo 70% tanto de primeros en juegos como de puntos conseguidos con el primer saque.
Cerró el primer asalto con tan sólo cinco errores no forzados y se apuntó la única pelota de rotura que dispuso a su favor.
Su estado de gracia continuó en el inicio del segundo set después de romper el servicio por partida doble de forma consecutiva que corroboraba los presagios de una cómoda victoria.
El 4-0 se presentó muy cuesta arriba ante un Berrettini muy lejos de intimidar el saque de su rival y Nadal cerró un impecable segundo parcial con tan sólo dos errores no forzados.
Sin embargo, Berrettini, que disputaba por primera vez unas semifinales en Melbourne Park, encontró las buenas sensaciones con su servicio, a diferencia de un Nadal más dubitativo con el saque, y se apuntó uno de los puntos del partido con una inverosímil derecha paralela que confirmó la rotura para establecer un 5-3 a su favor, el cual acabaría siendo definitivo para el posterior 6-3.
El tenista romano, que acumuló 57% de puntos con primeros en el segundo, cerró la tercera manga con un positivo 84% que ilustraron su mejoría.
Berrettini no bajó el listón con su imponente saque en el cuarto set y conectó una racha de 23 puntos consecutivos al saque que arrancó en el anterior parcial, para darle emoción a la primera semifinal de la duodécima jornada en Melbourne Park.
Sin embargo, Nadal, que se mantuvo a flote a pesar de la notable mejoría del italiano, frenó la inapelable racha de Berrettini al saque para robarle un juego al servicio que significaría el billete para la final después de confirmar su saque con el 5-3 a su favor.
Festejó con la misma ilusión con la que celebró aquel triunfo ante Roger Federer en las semifinales de Roland Garros de 2005 con 18 años al obtener su primera clasificación para una final de ‘slam’, pero esta vez tendrá la oportunidad de consagrarse como el tenista más laureado de todos los tiempos y superar la barrera de los 20 grandes.
Nadal se confirmó con seis participaciones como el sexto tenista con más apariciones en la final de Melbourne Park y superó las cinco presencias del escocés Andy Murray, el local Ken Rosewall y el sueco Stefan Edberg.
Logró su clasificación para una final de ‘slam’ número 29 y recortó distancias con sus principales competidores, Federer y Djokovic, que cuentan con 31 presencias.
También se convirtió, con 35 años de edad y 241 días, en el cuarto tenista más veterano en alcanzar una final en torneo ‘major’, y se situó por detrás de Rosewell, Federer y el australiano Mal Anderson.
A pesar de que es el ’slam’ donde consiguió menos títulos, es el segundo ‘major aussie’ más exitoso en cuanto a partidos ganados (74 victorias y 15 derrotas). El primero es Roland Garros con 105 victorias por tres derrotas. En Wimbledon cuenta con (53-12) y en el Abierto de Estados Unidos (64-11).