Lionel Messi conoció la justicia en el Mundial de Qatar. El ’10’ de la Selección argentina, después de una eterna lista de frustraciones con la camiseta albiceleste, por fin consiguió el botín más preciado al que aspira todo jugador: la Copa del Mundo.
En ese instante en el que Messi tocó el trofeo el pasado 18 de diciembre, tras ser el hombre clave del partido ante Francia, se difuminaron todas las críticas que la prensa gala le había hecho durante todo el año por su rendimiento en el PSG. También se escapó el recuerdo de que esta había sido la primera temporada en la que no apareció nominado al Balón de Oro en los últimos 17 años. Los escasos segundos en el paraíso sobrepasaron los meses en tierra, y Messi se volvió eterno.
Lo que se conoce ahora, poco más de dos semanas después del punto de no retorno, es que en las fotos más icónicas de su celebración, aquellas en las que en la Vuelta Olímpica es alzado en hombros por sus compañeros mientras levanta el trofeo, están ambientadas por una particularidad: la Copa que Messi tiene entre sus manos, la que no deja de levantar y besar, es falsa.
‘La falsa Copa de Messi’
El fotógrafo argentino Fernando de la Orden fue el encargado de develar el misterio.
A través de su cuenta de Instagram, de la Orden compartió una imagen en la que se le ve a Ángel Di María mostrarle la base de la Copa a un risueño Lionel Messi, en plena Vuelta Olímpica.
Sin más que añadir, la escena entre los futbolistas era la de uno que le decía al otro que estaba levantando una copa falsa.
Según pudo constatar el reportero gráfico, el trofeo que tenía Messi entre manos era una réplica hecha por una pareja de Buenos Aires, Manuel Zaro y Paula Zuzulich. Ellos dos, Zaro y Zululich, ingresaron la réplica al partido final. Y, en medio del alboroto del festejo, su trofeo fue a dar a la cancha.
Pues bien, la copa ‘pirata’ entró tres veces a la cancha y salió con los autógrafos de varios jugadores argentinos. Además, fue el centro de cientos de registros audiovisuales del tricampeonato argentino. Entre ellos, el que Messi puso de portada en la publicación con más ‘me gustas’ de la historia de Instagram.
Antes del Mundial contactamos a gente que se dedica a hacer copas y tardó seis meses en fabricarla. Tiene el peso de la original, está hecha con resina y cuarzo en el interior y bañada con una pintura símil oro. Hay algunos detalles, marcas y relieves que no son similares, pero la diferencia es mínima”, le dijo la pareja al diario argentino ‘Clarín’, sobre el éxito de su réplica.
Según cuenta el periodista Andrés Burgo, también argentino, en ‘El País’, de España, la historia de lo ocurrido en un principio fue celebrada, pero «otros hinchas, en cambio, arremetieron contra el matrimonio, que cerró sus redes y no volvió a tener aparición pública».