Seis puntos le faltan al conjunto catalán para revalidar LaLiga Santander, a falta de cinco jornadas. O lo que es lo mismo: ganando los dos próximos partidos ante el Alavés, en Mendizorroza, y el Levante, en el Camp Nou, alzará su 26º título. Siempre y cuando el Atlético de Madrid no pierda ante el Valencia.
Si el Barsa gana este martes en Vitoria y el conjunto colchonero no puntúa el día siguiente, los de Valverde celebrarían el título el miércoles y podrían pensar en el Liverpool.
Los albiazules atraviesan el peor momento de la temporada y acumulan cinco partidos sin ganar, que le han descabalgado de las posiciones de privilegio, a pesar de que mantiene opciones para engancharse a la séptima plaza que otorga la clasificación para las rondas previas de la Liga Europa.
Sin embargo, en la entidad vitoriana apenas quieren hablar de Europa y esperarán a lo que depare la clasificación al final de una temporada redonda para el Glorioso, que ha mantenido intacto su sueño continental durante una campaña inmaculada, a pesar de un final gris que ha empañado la regularidad de los alavesistas.
En el Barcelona, más allá de las sumas, el objetivo es ir paso a paso y aumentar la racha de 21 partidos sin perder que encadena en el campeonato doméstico.
La última derrota del Barcelona en Liga se remonta al 11 de noviembre de 2018, cuando el Betis conquistó el Camp Nou (3-4). Desde entonces, el equipo azulgrana suma 16 victorias y 5 empates que le han permitido afianzarse en el liderato con una renta de nueve puntos con respecto al Atlético de Madrid, su principal perseguidor.
Pese a esta ventaja, no se prevén rotaciones en Vitoria. Consciente de que todavía quedan ocho días para el partido de ida de semifinales de la Liga de Campeones, Valverde apostará por una alineación reconocible. Ante la Real Sociedad (2-1), Sergio Busquets, Sergi Roberto y Philippe Coutinho fueron suplentes y podrían regresar al once inicial.
La entrada del brasileño por Ousmane Dembélé sería una de las opciones que maneja el técnico azulgrana, si bien el francés, recuperado de su lesión muscular, necesita ganar ritmo de competición para llegar al 100% con vistas a la eliminatoria de Liga de Campeones.