Luis Fariñez: «Wuilker es muy enfocado en lo que hace»

Su primogénito era apenas un niño cuando tocó su primera pelota y entre ellos se produjo un amor a primera vista, de esos que son eternos. Ocurrió en un lugar que ha visto nacer tantos futbolistas: el barrio Nuevo Horizonte de Catia. Años después, Wuilker se unió a la lista de ídolos del sector caraqueño que ya tenía como figuras ilustres a Cristian Cásseres y Emilio Rentería.

Ahí, el novel arquero dio sus primeros pasos dentro de un terreno de juego. “Vivíamos frente a la cancha. El era muy niño. Siempre le gustó la portería. Era su pasión”, dijo Luis Fariñez. Y no demoró en llamar la atención de las personas que se encontraban en su entorno. “Había un profesor en el barrio que se llama Juan Ramírez. El trabajaba en la escuela del Santo Tomás de Villanueva y se lo llevaba. Antes, estuvo en el San Agustín de El Marqués. Con 7 años, ya jugaba colegial”, prosiguió.

Con Talentos Franco Rizzi tuvo la oportunidad de viajar en 2010 para disputar el V Torneo Internacional de Peñas de Fútbol 7. “Eso fue algo increíble. Hay una anécdota, en el momento que se va a montar en el avión agarró duro de la mano a Franco porque nunca había visto un avión”, explicó.

En el Caracas Fútbol Club conoció su primera estructura dentro del fútbol profesional, dónde terminó su formación. “Decidí llevarlo ahí porque es el equipo que mejor forma a los muchachos en la capital”, acotó.

En 2013, tuvo la oportunidad de entrenar con el Real Madrid a través del Campamento PAN que realizó Empresas Polar. “Fue una dura competencia porque había muchos jugadores. Los españoles se quedaron asombrados por su actitud y forma de trabajar”, contó.

A Luis le ha tocado vivir el mundial sub-20 desde lejos y se le infla el pecho con lo que ha logrado. “Wuilker es muy enfocado en lo que hace. Aparte de ser mi hijo, es como si fuera un hermano. Andamos juntos para todos lados. Es una bonita experiencia, con todo lo que se está viviendo en el país. Ha sido algo muy grato”, finalizó.