Los Milwaukee Bucks igualaron este miércoles las Finales de la NBA (2-2) tras imponerse en un partido durísimo y muy equilibrado a unos Phoenix Suns (109-103) en los que Devin Booker estuvo sobresaliente.
El joven escolta sumó 42 puntos (17 de 28 en tiros) pero no pudo darle la victoria a los Suns, que han perdido los dos partidos que han disputado en Milwaukee (EE UU)
Por parte de los Bucks, Middleton fue la gran figura con 40 puntos (15 de 33 en tiros), 6 rebotes y 4 asistencias.
Giannis Antetokounmpo, que dominó tanto el segundo como el tercer partido de las Finales, consiguió esta vez 26 puntos (11 de 19 en tiros), 14 rebotes y 8 asistencias.
Los Bucks fueron por detrás en el marcador durante casi toda la noche en un encuentro muy afilado en el que ningún equipo logró ventajas de más de 10 puntos.
En el tramo final del duelo, la sangre fría de Middleton fue determinante para tumbar a los Suns y para que la victoria se quedara en Milwaukee
Los Suns se vieron lastrados por sus 17 pérdidas de balón y por la discreta actuación de Chris Paul (10 puntos, 7 asistencias y 4 rebotes).
Pese a que Booker fue, con permiso de Middleton en el desenlace del encuentro, el amo y señor del partido, la noche del jugador de los Suns se vio muy marcada por los problemas con las faltas.
Tanto es así que Booker acabó eliminado por faltas en el último minuto del partido.
Los dos conjuntos tuvieron una noche floja desde el triple: los Bucks lograron 24% y los Suns consiguieron 30%.
Las Finales regresan ahora a Phoenix, donde el sábado se jugará el quinto partido en el que los Suns intentarán conservar el factor cancha.