El comandante de la Policía Nacional de Perú (PNP), Jorge Angulo, negó este jueves que agentes de esa fuerza hayan agredido a jugadores de la selección de fútbol de Venezuela tras el partido por las eliminatorias mundialistas jugado el martes pasado, en el que empataron 1-1 con la bicolor en Lima, pese a que imágenes de aficionados muestran golpes y empujones.
«Se ha esclarecido que no hay ni ha habido ningún tipo de manifestación contraria a ciudadanos extranjeros. Quizás los jugadores de la selección venezolana quisieron acercarse a sus aficionados y a sus compatriotas y se originó un poco de desorden, pero fue superado inmediatamente», declaró Angulo a periodistas.
Al término del partido, los futbolistas de la selección venezolana se acercaron a los aficionados que se encontraban en la grada. Los agentes se lo impidieron y se produjo un breve enfrentamiento entre policías y jugadores, que insultaron y escupieron a los uniformados.
El gobierno de Nicolás Maduro y la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) denunciaron este miércoles las agresiones contra futbolistas de la vinotinto por parte de agentes de la PNP en el Estadio Nacional de Lima.
En un comunicado, la cartera de Juventud y Deporte expresó su «indignación y rechazo» a las agresiones. Calificó de «bochornoso que un evento futbolístico de tanta envergadura haya sido tomado como campo de batalla para exponer las más bajas pasiones de xenofobia antivenezolana por parte de una autoridad policial del Perú».
La FVF publicó otro comunicado en el que se sumó a la condena por las agresiones «físicas y verbales» y por los «actos de discriminación y xenofobia» presuntamente sufridos por la selección de su país y la afición que les apoyaba en Lima.
Maduro tildó posteriormente de «malvados» a los autores de los ataques, de la «oligarquía de Perú» contra los integrantes de la selección venezolana de fútbol, que atribuyó a la derecha peruana, a la que acusó de xenofóbica.
El miércoles las autoridades venezolanos también acusaron al gobierno de Perú de haber «secuestrado» el vuelo de partida de la selección Vinotinto, aunque luego las autoridades peruanas le pusieron «paños fríos» a la situación.
Tras aclarar que el retraso se debía a razones mercantiles, la Cancillería de Perú anunció que iba a colaborar en solucionar los problemas que afrontaba la aeronave para surtir combustible y luego destacó que esto se logró gracias al «sentido de cooperación y solidaridad» y le deseó a la comitiva venezolana «un buen viaje de retorno a su país».