El consejo de administración del Comité de organización de los Juegos (Cojo) de París en 2024 aprobó este lunes el principio de una ceremonia de inauguración inédita en el río Sena, y que se desarrollará fuera de un estadio por primera vez en la historia de los Juegos de verano.
Más de 160 barcos con los deportistas de más de 200 delegaciones desfilarán por el río durante casi 6 km entre el Puente de Austerlitz y el Puente de Iena, en pleno centro de París, según el plan previsto.
El final de la ceremonia tendrá lugar en la explanada de Trocadero, junto a la Torre Eiffel.
Los organizadores prevén albergar a unas 600.000 personas, con una parte del público en las orillas, en tribunas de pago puestas para la ocasión, y otra parte del público podrá acceder gratuitamente a la ceremonia.
El presidente de la República, Emmanuel Macron, había oficializado en julio al margen de los Juegos de Tokio este proyecto que había levantado reticencias por parte de las fuerzas del orden, inquietas por poder ofrecer seguridad a un evento de tal amplitud.
«Hoy es un momento fuerte. Hay muchas emociones, mucho entusiasmo. La ceremonia de inauguración es forzosamente lo más grande», declaró Tony Estanguet, patrón de los Juegos de París 2024, en una rueda de prensa al término del consejo de administración del Comité de organización (Cojo).
Las fuerzas del orden habrían querido limitar el público a 250.000 personas, cuando los organizadores y la alcaldía de París veían un mayor número, «alrededor de dos millones de personas en el proyecto inicial», había asegurado una fuente próxima al ayuntamiento.
Preocupación por la seguridad
Al término de un comité interministerial dedicado a los Juegos de París hace un mes en el departamento de Seine-Saint-Denis, el primer ministro Jean Castex había pedido al ministro de Interior Gérald Darmanin formular «propuestas» para la seguridad del evento «de aquí a final de año».
Casi medio centenar de reuniones con todas les autoridades implicadas, del ministerio del Interior a las instituciones fluviales del Sena, pasando por la alcaldía de París, fueron necesarias para estudiar la factibilidad del proyecto susceptible de evolucionar.
«Una ‘premiere’ inédita, vanguardista», confió Tony Estanguet a la AFP, que quiere que sea «popular y accesible al mayor número de personas», siendo por primera vez de acceso gratuito para una parte del público.
Todo ello necesita una logística milimétrica, «con cuestiones que tenemos sobre muchos aspectos, meteorología, transporte, espectáculo», explica Thierry Reboul, director de ceremonias de París-2024, jefe de orquesta de este ambicioso proyecto.
«El Sena permite también a los equipos de París-2024 planear una parte artística extremadamente original. Artistas suspendidos, atracciones deportivas en los puentes, juegos de luz sobre el agua… Buscamos ideas», reconoce Thierry Reboul.
Al término de este desfile fluvial, los deportistas y los dirigentes, incluidos los jefes de Estado, se reunirán en la explanada de Trocadero para los discursos y el final de la ceremonia.
Los organizadores van «a continuar los trabajos, en particular sobre las cuestiones presupuestarias, la seguridad y las consecuencias sobre la ciudad y el ecosistema del río», precisa París-2024.