La gimnasta húngara Ágnes Keleti, superviviente del Holocausto nazi y la campeona olímpica más veterana, acaba de cumplir 100 años feliz por el reconocimiento de las autoridades políticas y deportivas de su país, y con un premio a su trayectoria del Comité Internacional de Fair Play (NFPB).
Nacida el 9 de enero de 1921 en Budapest en una familia judía, Keleti obtuvo medallas de oro en las Olimpíadas de 1952 en Helsinki y de 1956 en Melbourne, y otras 3 de plata y 2 de bronce en los mismos juegos.
Empezó a practicar gimnasia a los 4 años y con 19 ya ganó su primer oro en un campeonato nacional.
Cuando en la Hungría pronazi del final de la Segunda Guerra Mundial comenzaron las deportaciones de judíos a campos de exterminio, Keleti logró salvarse con documentos falsos.
Formó parte de la delegación húngara en los Juegos Olímpicos de 1948 en Londres, pero no pudo presentar sus ejercicios por una lesión, y fue en las dos siguientes citas donde se llevó el oro.
Después de los juegos de 1956 se residenció en Israel, donde trabajó como entrenadora y profesora universitaria, participando en la formación de profesores de gimnasia.
Tras la caída del Telón de Acero, en 1990, volvió a Hungría.
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, y el de Israel, Benjamin Netnayahu, han felicitado a la atleta en su cumpleaños y alabado su trayectoria, mientras que el presidente del NFPB , Jenö Kamuti, le entregó el premio en una ceremonia en una sinagoga de Budapest.
«La carrera como gimnasta y profesora universitaria de Ágnes Keleti estuvo caracterizada por la aceptación, la tolerancia, lo que es una de las ideas básica del Fair Play», aseguró Kamuti, según recoge el portal deportivo Nemzetisport.