A pocas horas de la apertura de la agencia libre, la NBA entró en erupción este jueves al reportarse que Kevin Durant, uno de los mejores jugadores de la última década, demandó a los Brooklyn Nets su traspaso a otra franquicia.
Durant, que tiene tres años más de contrato con Brooklyn, comunicó su decisión este mismo jueves al propietario del equipo, el multimillonario Joe Tsai, según explicó en Twitter el reputado periodista de ESPN Adrian Wojnarowski.
El alero, de 33 años, comunicó también una lista de sus destinos de preferencia, entre ellos los Phoenix Suns y los Miami Heat, pero los Nets se disponen a escuchar ofertas y «buscarán un retorno histórico en jugadores y elecciones de Draft», agregó Wojnarowski.
Poco después, el periodista reportó que alrededor de la mitad de equipos de la NBA ya se han puesto en contacto con los Nets para pujar por uno de los mejores anotadores de la historia.
El alero, que promedió la pasada campaña 29,9 puntos, 7,4 rebotes y 6,4 asistencias por partido, podría convertirse en el jugador de mayor calibre en ser traspasado en las últimas décadas.
La partida del alero, 12 veces All-Star y MVP (Jugador Más Valioso) de la temporada 2014, culminaría a su vez el fracaso de uno de los proyectos más ambiciosos de la historia de las ligas deportivas estadounidenses.
El fracaso de un superequipo
Tras ganar dos anillos con los Golden State Warriors (2017 y 2018), Durant se unió en 2019 al estelar y controvertido base Kyrie Irving para formar un nuevo superequipo en Brooklyn, una franquicia modesta que les entregó plenos poderes.
Tras aguardar un año a que Durant se recuperara de una grave lesión, los Nets lanzaron el asalto al título haciéndose también con el escolta James Harden, por quien pagaron un enorme precio en elecciones de Draft.
Diezmados por lesiones de Irving y Harden. el estelar trío falló en su primer intento al caer en segunda ronda de 2021 ante los Milwaukee Bucks.
El derrumbe del proyecto llegó la pasada temporada con la negativa de Irving a vacunarse contra el coronavirus, que le inhabilitó para jugar gran parte de la campaña, y la demanda de traspaso de Harden, que se fue a los Philadelphia 76ers disconforme con la convulsa situación en Brooklyn.
El ‘Big 3’ solo disputó 16 partidos juntos, ganando 13 de ellos, y dejó para siempre la duda de hasta donde hubiera podido llegar una de las mayores concentraciones de talento que ha visto la NBA.
En los últimos playoffs, sin apenas ayuda de Irving ni del lesionado Ben Simmons, la mayor pieza que llegó por Harden, Durant no pudo impedir que los Nets fueran barridos 4-0 en la primera ronda por los Boston Celtics.
Irving en el mercado
Durante los últimos años se consideró que Durant respaldaba a su cercano amigo Kyrie Irving en las numerosas polémicas en que el base se vio involucrado, aceptando incluso el costo que tuvo para los Nets su negativa a vacunarse contra el coronavirus.
En 2021, Durant parecía ligar su futuro a los Nets al renovar por cuatro temporadas y 198 millones de dólares.
A Irving, en cambio, no se le ofreció un contrato de ese tamaño por lo que el lunes ejerció su opción para renovar por una temporada adicional, asegurándose un salario de 36,9 millones de dólares.
Los Nets tienen todavía la opción de traspasar a Irving. Según Wojnarowski, es improbable que el base permanezca en la franquicia si Durant se marcha y equipos como Los Angeles Lakers tendrían ahora más facilidades para reclutarlo.
Según el periodista de ESPN, los Nets han puesto a la venta a todos sus jugadores mientras definen qué rumbo tomar. El inicio de un proceso de reconstrucción resulta improbable ya que sus próximas rondas de Draft fueron a parar a los Houston Rockets en el traspaso por Harden.
La demanda de salida de Durant se conoció solo tres horas antes de que se abra oficialmente el período de agencia libre, en el que los equipos pueden contratar a jugadores sin contrato.