El gobierno de Reino Unido ofreció a la UEFA la posibilidad de albergar la final de la Champions League, prevista para el día 29 de mayo en Estambul. La propuesta se hizo para evitar desplazamientos de aficionados a una «zona roja» por covid-19 como es Turquía.
«Los aficionados del Chelsea y del Manchester City no deberían viajar a Turquía para la final de la Champions», indicó este viernes el ministro de Transporte de Reino Unido, Grant Shapps.
El ministro es el máximo responsable de la movilidad en el país e hizo su declaración una vez confirmó que Turquía pasa a la lista de países a evitar viajar por la pandemia del coronavirus.
Schapps explicó que los países de la lista roja de covid-19 no deberían recibir turistas excepto en las circunstancias más extremas. Asimismo, añadió que el gobierno estaba abierto a albergar la final en el Reino Unido.
La UEFA esperaba dar a ambos clubes un mínimo de 4.000 entradas cada uno para el partido en el Estadio Olímpico Ataturk. Schapps aseguró que la Asociación de Fútbol (Federación Inglesa) está en conversaciones con la UEFA para cambiar el partido. Sin embargo, en última instancia, será una decisión de la UEFA.
«El Reino Unido tiene un historial exitoso de albergar partidos con espectadores, por lo que estamos en una buena posición para hacerlo. Estamos muy abiertos a ello, pero al final es una decisión que debe tomar la UEFA. Pero dado que hay dos clubes ingleses en la final, esperamos escuchar lo que tienen que decir», recoge la BBC.
Además, el ministro de Transporte británico recordó que los ciudadanos del Reino Unido que regresan de países de la lista roja deberán permanecer en cuarentena en un hotel. El lugar debe estar aprobado por el gobierno. Asimismo, se señaló que una cuarentena podría tener un impacto potencial en los jugadores seleccionados para la Eurocopa 2020, que comienza el 11 de junio.
Si la final se trasladase al Reino Unido, Wembley sería casi con total seguridad el estadio elegido para la pelea del título más importante en el Viejo Continente.