El exguardameta internacional español Iker Casillas denunció este viernes, a través de un comunicado, el acoso mediático permanente al que está siendo sometido tanto él como su familia y negó que sufriera una recaída sobre el infarto de miocardio que lo apartó de los terrenos de juego el pasado 1 de mayo de 2019.
Casillas, ante el acoso mediático sufrido a raíz de su ruptura con su expareja Sara Carbonero el pasado 12 de marzo, indicó que fue un proceso de separación amistoso y pidió respeto para su familia.
«El acoso mediático al que estamos siendo sometidos tanto mi familia como yo personalmente, nos está generando un daño irreparable. Me gustaría recalcar que nuestra separación fue amistosa y en el comunicado que emitimos mi mujer y yo, pedimos respeto para ella, para mis hijos y para mí. Lamentablemente no se está produciendo, reflejándose en un acoso permanente», expresó.
El exportero del Real Madrid y del Oporto anunció que emprenderá acciones legales contra aquellos que han difundido informaciones «totalmente falsas».
Sobre las informaciones que apuntaron a una recaída sobre su enfermedad, dijo Casillas: «Diversas revistas han difundido noticias de mi estado de salud, haciendo entrever que había sufrido una recaída sobre la enfermedad que superé, cuando se trató de un simple ataque de alergia».
Y concluyó: «Para finalizar pido respeto a este sector en el que nunca he participado ni personalmente ni profesionalmente».
Casillas y la periodista Sara Carbonero decidieron separarse tras 11 años. Pero la ruptura evitará el espinoso camino de la división de bienes debido a que mantuvieron sus cuentas por separado.