Todas esas victorias de temporada regular para Gerrit Cole y los Astros de Houston traen como consecuencia que el manager AJ Hinch se sienta optimista al llegarcon él como abridor al juego decisivo de este jueves contra los Rays de Tampa Bay.
“Tienen que venir a nuestra casa y vencernos otra vez”, dijo Hinch. “Con Cole en el montículo, no sé quién podría estar más confiado que nosotros”.
Cole abrirá por los Astros en el quinto juego de su Serie Divisional.
El derecho no ha perdido desde el 22 de mayo, e impuso un récord de la franquicia, al ganar 17 decisiones consecutivas, coronadas por una gema de 15 ponches en el segundo duelo de la serie, según Lasmayores.com.
Tratará de otorgarle a Houston un boleto a su tercera Serie de Campeonato de la Liga Americana en fila, y lo hará en casa, porque el equipo ganó 107 encuentros (una marca de la franquicia) para merecer la ventaja de la localía a lo largo de la postemporada.
“Me encanta que estemos aquí”, comentó Hinch. “La manera en que llegamos aquí es estresante, simplemente porque no quieres llegar al quinto juego, peleamos todo el año para tener el mejor récord y para ganar nuestra división, con lo que tenemos este juego en particular en casa”.
Los Astros contaron con actuaciones espléndidas de los lanzadores Justin Verlander y Cole para tomar ventaja de 2-0 en la serie. Luego los Rays atacaron a Zack Greinke, la adquisición en la fecha límite para canjes, con seis carreras durante 3.2 innings.
También se impusieron por paliza de 10-3 en el tercer desafío, antes de que Verlander volviera con poco descanso y fuera derrotado 4-1 en Tampa Bay.
La serie se empató, y el ganador del jueves se enfrentará con el campeón del Este de la Americana, los Yanquis de Nueva York.
Houston tuvo una foja de 60-21 en Minute Maid Park durante la temporada regular, pero los Rays se mostraron audaces para vencer a los Atléticos en el juego de comodines antes de defenderse de la eliminación con sus dos últimas victorias.
En los playoffs por primera vez desde 2013 y considerados como víctimas seguras en esta serie contra un equipo plagado de estrellas, los Rays han jugado mucho mejor que lo que dicen los nombres en las espaldas de sus jerseys.