El seleccionador islandés, Heimir Hallgrimsson, anunció ayer su dimisión, al tiempo que expresó su «respeto» por el papel desempeñado por sus jugadores en el mundial de Rusia.
«Estoy agradecido de haber formado parte de ese equipo. Sus éxitos han generado un gran respeto por el fútbol islandés. Deseo mucha suerte a la selección», indicó el técnico, en un comunicado reproducido por la Federación Islandesa.
El torneo de Rusia fue el debut mundialista de Islandia, que pese a obtener apenas un punto, al empatar con la selección de Argentina, fue considerado un conjunto revelación frente a las grandes potencias futbolísticas.
Hellgrimsson es dentista de profesión y había dirigido ya al conjunto en la Eurocopa de 2016, entonces compartiendo tareas técnicas con el sueco Lars Lagerbäck, y logró el hito de alcanzar los cuartos de final de ese torneo se convirtió en seleccionado en solitario.
Tras su eliminación en la primera ronda y la derrota sufrida ante Croacia, el seleccionador dejó en el aire su continuidad en el puesto, tras mostrarse orgulloso del rendimiento de sus jugadores.