La etapa de Luis Enrique Martínez como seleccionador español inició con muestras de un gran ambiente con los jugadores, con un entrenamiento abierto al público sin Raúl Albiol ni Diego Llorente, y con la presencia en el grupo de Iago Aspas ocupando el hueco dejado por Diego Costa.
Los internacionales españoles, 24 en la primera lista de Luis Enrique con once caras nuevas respecto a los que defendieron a la Roja en el Mundial de Rusia, saludaron a Luis Enrique a su llegada a la concentración y se pusieron a sus órdenes con un entrenamiento vespertino en el que el técnico se mostró muy cercano.
David de Gea y Pau López integraron un reducido grupo de jugadores que habían jugado el domingo y tuvieron una sesión más suave.
Estuvieron junto a Busquets, Gayá, Sergi Roberto y Rodrigo. Realizaron carrera, tablas de abdominales y estiramientos sobre el césped. El resto de internacionales se entrenó con mayor intensidad. Iniciaron con un calentamiento y los habituales rondos, en los que se vio como jugadores del mismo equipo se buscaban y en uno estaban Sergio Ramos, Ceballos, Marco Asensio, Isco, Carvajal, Nacho con Morata y Suso.
Luis Enrique, de corto y con gafas de sol, dejaba trabajar a sus ayudantes y observaba todo al detalle a distancia hasta que a la media hora juntó a sus jugadores en un corrillo y dio las órdenes de los ejercicios que realizarían.