Un autogol del defensor venezolano Jean Frank Gutiérrez y otro tanto del cafetero Leonardo Castro fueron suficientes para que la selección de Colombia diera cuenta de la sub-21 de Venezuela 2-1 en Barranquilla, para alzarse con la presea de oro del fútbol de los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
La Vinotinto, que llegó a su tercera final consecutiva de esta competencia luego de perder contra Colombia en Cartagena en 2010 y contra México en Veracruz 2014, esperaba cambiar la historia. Y estuvo a punto de lograrlo luego que Yohandry Orozco, con un tiro libre que dio un defensa neogranadino, se incrustara a un costado del arquero de Colombia para colocar el juego 2-1.
Sin embargo, el equipo de la casa sacó a relucir los pergaminos que lo colocaban como favorito para conquistar la presea de de oro y, aún cuando terminó con 10 hombres luego de la expulsión de Larry Vásquez, supo controlar los ataques venezolanos, escuadra que también terminó con 10 jugadores tras la expulsión de Ronaldo Chacón.
La selección nacional luchó por la de medalla de oro hasta el final del encuentro, pero volvió a quedarse en la orilla y queda en el recuerdo el triunfo Vinotinto en los CAC realizados en Maracaibo en 1998 bajó la conducción del desparecido Lino Alonso.