Sergio Ramos, capitán del Real Madrid, y Mohamed Salah, máxima figura del Liverpool, protagonizaron una de las jugadas más polémicas de la final de la Champions League 2018, en donde el equipo español se consagró por tercer año consecutivo como máximo campeón europeo.
A los 24 minutos del primer tiempo Ramos y Salah disputaron una pelota que ocasionó que ambos cayeran al piso. Durante la caída, el brazo del egipcio quedó enganchado del brazo del capitán de la «casa blanca», por lo que Salah tuvo que salir lesionado del encuentro.
El delantero, que podría perderse el Mundial de Rusia 2018, salió del campo de Olímpico de Kiev en medio de lágrimas para recibir atención médica.
En las redes sociales estallaron con mensajes que acusan a Ramos de haber lesionado «intencionalmente» al egipcio.
«Al parecer Salah se queda sin Mundial. Y Ahora no me vengan a a decir que lo de Ramos fue sin intención», escribió un usuario en Twitter.