El Flamengo y su técnico, el español Domènec Torrent, buscarán este sábado 15 de agosto su primera victoria en Liga, en medio de las dudas que aún genera el protocolo sanitario de la Confederación Brasileña de Fútbol para contener los contagios de coronavirus entre los equipos.
El conjunto de Río de Janeiro, defensor del título, intentará sumar sus primeros tres puntos en el Campeonato Brasileño en casa del recién ascendido Coritiba tras dos inesperadas derrotas en las dos primeras jornadas.
El cuadro de Torrent perdió por 0-1 en el Maracaná contra el Atlético Mineiro, dirigido por el argentino Jorge Sampaoli, y el miércoles pasado sufrió una sonrojante goleada (3-0) contra el Atlético Goianiense, otro de los recién llegados a la categoría reina del fútbol brasileño.
Con el equipo como colista de la clasificación, la afición rubronegra empezó a cuestionar los métodos de Torrent, brazo derecho del técnico Pep Guardiola en el Barcelona, el Bayern Múnich y el Manchester City, y añorar a su antecesor, el portugués Jorge Jesús, ahora en el Benfica de su país.
La situación del Flamengo podría complicarse aún más si pierde a Rafinha, pieza clave en los títulos de Liga y Copa Libertadores de 2019. De acuerdo con la prensa local, el lateral derecho está cerca de volver al fútbol europeo de la mano del Olympiacos griego.
De confirmarse su salida, la directiva del club carioca tendría serias dificultades para encontrar un sustituto de su nivel, pues el mercado de transferencias internacionales está cerrado hasta octubre, por lo que solo podría buscar jugador que actúan en Brasil o que están sin contrato.
En el otro extremo de la tabla, el Athletico Paranaense, el Internacional y el Atlético Mineiro, con seis puntos cada uno, defenderán el liderato frente al Santos, el Fluminense y el Ceará, respectivamente.
El equipo colorado de Porto Alegre, al mando del argentino Eduardo Coudet, registra su mejor inicio en el Campeonato Brasileño de la última década gracias, en parte, al acierto de Paolo Guerrero.
El veterano delantero peruano marcó el único gol del triunfo en la primera fecha frente al Coritiba (1-0) y repitió en la víspera contra el Santos (2-0).
Sin embargo, el fútbol sigue pendiente de la evolución de la pandemia del coronavirus, que deja ya en el país más de 105.000 muertes y 3,2 millones de contagios, y sigue fuera de control en algunas regiones nacionales.
El avance del covid-19 ya obligó a suspender tres partidos, uno de ellos el Goiás-Sao Paulo de Primera División, de competencias nacionales por brotes en alguno de los equipos participantes.
La Confederación Brasileña de Fútbol se vio obligada a cambiar el protocolo sanitario que elaboró para el retorno del fútbol y que ha provocado un enorme desconcierto después de que permitiera jugar a futbolistas con diagnóstico aún positivo.
Ese fue el caso del Atlético Goianiense, que el miércoles pasado, en su partido contra el Flamengo, le fue autorizado alinear a cuatro de sus futbolistas, infectados con el covid-19.
El presidente de la Comisión Médica de la CBF, Jorge Pagura, alegó en una entrevista con GloboEsporte que, aunque el examen siga detectando la presencia del virus en el organismo, el jugador puede participar tras cumplir «el aislamiento de 10 días».
En su opinión, pasados esos 10 días, el paciente ya no puede «transmitir el virus a nadie» y «no hay riesgo».
Pocos horas antes de ese partido contra el Flamengo, el Atlético Goianiense supo que tenía dos positivos más en su plantilla, Matheuzinho y Júnior Brandão, quienes fueron impedidos de jugar.
La confederación brasileña tampoco ha definido qué número de positivos es necesario en un equipo para aplazar un encuentro, tampoco ha puesto fecha a los ya suspendidos.
Partidos de la tercera jornada del Campeonato
Sábado: Gremio-Corinthians, Coritiba-Flamengo y Palmeiras-Goiás.
Domingo: Atlético Mineiro-Ceará, Vasco da Gama-Sao Paulo, Bahía-Bragantino, Fluminense-Internacional, Atlético Goianiense-Sport, Fortaleza-Botafogo y Santos-Athletico Paranaense.