La fase final a ocho de la Champions League de fútbol, que se celebrará en Lisboa entre los días 12 y 23 de agosto, tendrá un impacto de unos 50 millones de euros en la capital lusa, conforme a un estudio del Instituto Portugués de Administración y Marketing.
El IPAM estima que casi la mitad del dinero, 49%, se recaudará en restauración, con porcentajes menores para alojamiento 13%, viajes 9% y otras actividades turísticas 5%, mientras que el resto se repartirá entre publicidad, eventos y operaciones comerciales.
El informe calcula que a Lisboa acudirán unos 16.000 aficionados sin entrada y otros 3.300 visitantes entre equipos de fútbol, periodistas, personal de apoyo de invitados de la UEFA.
No obstante, para el profesor que coordinó el estudio de la IPAM, Daniel Sá, el impacto más importante será el mediático, el hecho de que Lisboa va a estar en la boca del mundo durante 12 días.
«En un contexto de pandemia, donde las economías quieren recuperar la confianza y donde Portugal tiene el turismo como pilar decisivo de su PIB, esta es la mejor campaña de promoción y confianza de Portugal en todo el mundo», afirmó Sá.
Los estadios Da Luz Benfica y José Alvalade Sporting albergarán la final de esta edición 19-20 de la Champions, en la que Barcelona y Real Madrid podrían estar si solventan sus choques previos de octavos de final contra Nápoles y Manchester City respectivamente.